Qué inventazo son estas masas que se pueden comprar en cualquier súper, sobre todo para las que pasamos de amasar, verdad? En un pis pas podemos hacer cualquier tarta salada y con solo una ensaladita para acompañar, tenemos una comida o cena estupenda que a todo el mundo le gusta.
Esta quiche la hice por mis vegetarianos, que cada vez que me vienen a comer me complican la existencia pensando en una comida que les guste a todos y no tener que hacer algo diferente para los carnívoros, y aunque yo le hubiera añadido un poco de bacon o jamón serrano, hay que adaptarse... y como la verdad es que está muy rica, te la recomiendo.
Esta quiche te recordará a la pizza margarita, y si le cambias el queso emmental por mozzarella muchísimo mejor, pero ese día no tenía en casa y es el que le puse.
Ya verás qué fácil:
Ingredientes:
- 400 gr. de tomates (cuanto más maduros mejor)
- una lámina de masa quebrada
- 2 huevos
- 200 ml. de nata (crema de leche) líquida (crema de leche)
- 1 cucharada de orégano
- sal
- 150 gr. de queso rallado emmental o mozzarella.
Elaboración:
1. Pelar los tomates, quitarles las pepitas y trocearlos en daditos. Puedes escaldarlos unos segundos en agua hirviendo con un corte en forma de cruz o quitar la piel con un pelador de patatas si tienes prisa.
Dejarlos escurrir en un colador para que suelten todo el agua y evitar que se humedezca demasiado la masa de la quiche.
2. Extender la masa quebrada en un molde de horno (el mio de 20 cm.)
3. Una vez los tomates hayan soltado el agua, los colocamos encima de la masa.
4. Batimos los huevos con una pizca de sal, añadimos la nata (crema de leche), la mitad del queso rallado y el orégano. Mezclamos bien y cubrimos los tomates con ella y terminamos con el resto del queso rallado.
5. Metemos en el horno previamente calentado a 200ºC hasta que esté cuajada y la superficie dorada, más o menos 40-45 minutos.
Está más rica caliente, así que no tardes mucho en servirla que la vas a disfrutar.