Buenas, aquí estamos de nuevo. Hoy os traigo una receta muy muy sencilla y muy muy resultona.
Cómo os digo en el título esta receta es fruto de restos de otras recetas (es que no hay forma de cuadrar ingredientes), pero como no hay mal que por bien no venga, el resultado ha sido estupendo.
Sin más dilación vamos a por ella.
INGREDIENTES:
Masa filo.
Sobrasada.
Huevos de codorniz.
Aceite de oliva.
ELABORACIÓN:
Utilizamos dos láminas de masa filo, cortaremos 4 cuadrados.
En cada uno de los cuadrados ponemos una cucharadita de sobrasada y un huevo de codorniz.
Cerramos los saquitos uniendo las 4 puntas en el centro.
Ponemos papel de horno encima de la bandeja y colocamos los saquitos, los pintamos con un poquito de aceite de oliva.
Llevaremos al horno, precalentado a 240º arriba y abajo, los tendremos hasta que tomen un color dorado.
Os aseguro que están riquísimos, y no digáis que no son fáciles que no me lo creo.
Y eso es todo por hoy, hasta me extraño de mí misma de lo poco que me he enrollado, pero no os preocupéis, el jueves nos vemos de nuevo, y esta vez tendréis mucho más rollo, jeje.
Un beso enorme a todas/os.