¡Holaaaa! ya estoy por aquí otra vez y os traigo una tarta que casi casi gustara a todo el mundo exceptuando a los que no les guste la canela.
Describiría la tarta como especial totalmente. Empecemos porque te conquista por el olor, huele genial. Luego la pruebas y quizás no es el sabor más espectacular que hayas probado pero poco a poco te va gustando más. Es de estas cosas que te enganchan poco a poco. Bueno a mi es una tarta que me ha encantado porque adoro los bizcochos de plátano, adoro las nueces, adoro la canela y adoro el frosting de queso por encima de cualquier frosting.
Os la recomiendo 100% y, si no también se puede hacer simplemente el bizcocho y comerlo para desayunar. De lo que sobro a cortarlo me lo comí jeje.
La receta que viene en el libro es de 3 huevos pero yo no la quería tan grande y la hice de 2 y en un molde 15 cm por 10 cm de alto. En la receta el bizcocho no lleva almíbar y en verdad no lo necesita porque es muy jugosito por sí solo pero yo le puse un poco de almíbar de azúcar moreno para terminar de darle ese punto extra de jugosidad. Eso ya en gustos. En la receta se utilizan nueces, recomiendan las pacanas pero sin problemas se puede utilizar la común a la que estamos acostumbrados.
El frosting de queso no es el que viene en el libro. Este que hago yo me encanta. Justo de dulzor, buena textura para utilizar manga, me encanta.
Os pongo la receta tal cual y entre paréntesis los cambios que yo he hecho.
Ingredientes:
200 gr de azúcar
2 huevos
200 gr de aceite de girasol
180 gr de plátano aplastados (200 gr)
1/2 cucharadita de canela
200 gr de harina de trigo
1 pizca de sal
1/2 cucharadita de bicarbonato
1/4 cucharadita de vainilla
65 gr de piña enlatada, en trozos pequeños (80 gr)
65 gr de nueces troceadas (80 gr)
Ingredientes frosting:
250 gr de mantequilla a temperatura ambiente.
200 gr de azúcar glass tamizada
600 gr de queso crema frío
1/4 cucharadita de vainilla
Elaboración:
Precalentar el horno a 170º. Engrasamos el molde
Mezclamos en un recipiente la harina, la sal y el bicarbonato. Reservamos
Ponemos el azúcar, los huevos, el aceite, los plátanos,la canela y la vainilla y, batimos hasta que sea una masa homogénea.
Añadimos los ingredientes secos en dos tandas hasta que este bien incorporado.
Añadimos la piña y las nueces a mano y repartimos bien por toda la masa.
Vertemos en nuestro molde o moldes y horneamos hasta que al pinchar con un palillo salga limpio.
Recomiendo hacerlo en varios moldes porque tardara menos en hacerse, aproximadamente en 30 minutos estará listo. En el molde alto en mi caso estuvo 1 hora y algo más.
Lo dejamos 10 minutos en una rejilla dentro del molde. Luego desmoldamos y dejamos enfriar completamente.
Mientras se enfrían vamos hacer el frosting.
Ponemos la mantequilla a batir y cuando este cremosa añadimos el azúcar de golpe y batimos a velocidad media hasta hacer la típica buttercream.
Añadimos la vainilla y el queso recién sacado de la nevera y batimos a velocidad media 2 minutos simplemente hasta incoporarlo.
Ahora teniéndolo todo, simplemente cortamos el bizcocho, calamos con el almíbar si optamos por utilizarlo, rellenamos y cubrimos y decoramos con manga o con lo que queramos.
Y, ya solo queda lo mejor...¡COMERLA! Espero que os guste, si la probáis ya me contaréis.
Fuente: este post proviene de Dulzura extrema, donde puedes consultar el contenido original.
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