¡¡¡Hola!! ¿como vamos con Mayo? cansados de este tiempo raro ¿no? bueno ya queda poco y acabaremos hartos de tanto calor, yo por lo menos.Quizás no es el mejor día para publicar un helado pero que queréis que os diga yo como helados en Diciembre y este esta tan rico que no me puedo aguantar a daros la receta, porque lo tenéis que probar si o si, es espectacular. Es el mejor helado que he hecho hasta ahora tanto en sabor como en el textura.
Lo único, eso si, le puse un poco de colorante verde porque se queda con un color un poco feo pero vamos eso cada uno.
La receta lleva miel: no sabe a miel. Lo recalco porque se que mucha gente no puede con ella. Utilizamos la miel en sustitución del azúcar invertido ya que tienen el mismo poder endulzante y anticristalizante. Dependiendo del sabor del helado si que se puede notar la miel, pero en este caso no.
Ingredientes:
100 gr de pistachos
300 gr de leche (200 + 100)
100 gr de queso crema
150 gr de chocolate blanco
2 yemas
80 gr de azúcar moreno
30 gr de miel
5 gr de maizena
Elaboración:
Ponemos en un recipiente los pistachos y 100 gr de leche caliente y dejamos reposar 10 minutos. Después trituramos para formar una pasta de pistacho. Aquí ya depende de si queréis notar trocitos de pistacho o no, yo recomiendo que si, pero va en gustos.
Ponemos en un cazo el resto de la leche, el queso crema, el chocolate blanco y la pasta de pistacho a fuego medio.
Mientras se calienta la mezcla anterior, en otro recipiente ponemos las yemas, el azúcar moreno, la miel y la maizena y batimos enérgicamente hasta que cambie ligeramete de color, un poco más clara.
Cuando la leche este caliente, retiramos del fuego, tapamos y dejamos infusionar 5 minutos.
Pasados los 5 minutos añadimos a la mezcla de yemas 1/4 de la mezcla de leche y removemos. Esto lo hacemos para igualar temperaturas. Cuando este todo mezclado, ponemos todo en el cazo a fuego medio de nuevo sin parar de remover.
Veremos que va espesando, cuando veamos que rompe a hervir retiramos. Ponemos en un recipiente y a la nevera mínimo 8 horas.
Pasado el tiempo, ponemos a funcionar nuestra heladora y seguimos las instrucciones de la misma.
¿No tenéis heladora? no pasa nada. Seguimos los pasos exactamente igual. Cuando pase las 8 horas como mínimo en la nevera, ponemos directamente en el congelador. Pasados 30 minutos, sacamos y batimos (varillas o tipo thermomix) para romper los cristales. Esto lo debemos hacer mínimo 4 veces cada 30 minutos. Cuantas más veces más cremoso.
Probarlo, esta espectacular.
Fuente: este post proviene de Dulzura extrema, donde puedes consultar el contenido original.
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