Tapa las ollas
Si estás preparando sopas, salsas o recetas con medios líquidos, taparlas es la forma de conseguir mayor eficiencia en la preparación. Si la olla está tapada, en su interior se logrará una subida de temperatura más efectiva.Sal, al comenzar y al terminar
Un buen truco para no arruinar el sabor de tus platos, es sazonar primero con un poco de sal. Luego, mientras vamos terminando la preparación, ajustamos la sal de acuerdo al sabor que deseemos conseguir. Siempre podrás agregar más sal, pero nunca vas a poder desalar un plato en el que nos excedimos.Hay un truco, que recomiendan muchas expertas antiguas en cocina, que implica añadir una papa en la preparación para absorber los minerales. Es un truco que puedes probar, pero antes, es recomendable intentar salar de a poco para no excedernos.
Respeta los tiempos de cada receta
Cocinar requiere paciencia. Es importante, cuando vamos a cocinar, que atiendas a los tiempos que cada receta te indica para sus procedimientos. Si te apresuras, o te demoras demasiado, puede cambiar de manera drástica el sabor de tu comida. Si tras cocinar, la receta indica que el plato debe reposar o que hay que refrigerar. No lo ignores. Ese pequeño paso puede ser la clave para que el sabor adquiera un nivel diferente.Antes de cocinar, calienta las sartenes a fuego alto
Antes cocinar, es recomendable calentar los sartenes a fuego alto. Si las sartenes están en alta temperatura, algunos ingredientes como las carnes, no se van a deshidratar. Ponemos mantequilla o aceite en la sartén, esperamos que se calienten y entonces bajamos el fuego al nivel necesario.Picar todo primero
En las grandes cocinas profesionales, siempre hay que tener todo listo antes de empezar a cocinar, y uno de los primeros pasos es que los ingredientes estén picados y listos para colocar en la receta. Algo parecido a lo que sucede cuando vemos un programa de cocina y los presentadores y chefs nos cuentan cómo van preparando previamente los ingredientes antes de avanzar paso a paso con la preparación.Picar los ingredientes, tenerlos fondos de cocción listos y conocer y recordar la receta (además de poder tenerla a mano) para no perder tiempo.