Remedios y prevención
Existen diversas prácticas que podemos llevar a cabo para eliminar o prevenir la celulitis. Además de una alimentación adecuada, el ejercicio físico y los masajes tienen efectos muy importantes para reducirla, ya que activan y mejoran la circulación de la zona afectada.Una vez conocida la relación circulación-celulitis sabemos que un buen riego sanguíneo retrasará la acumulación de grasas y, al mismo tiempo, la ausencia de las mismas permitirá que la sangre fluya con facilidad. El estrés y la tensión pueden reducir la calidad de la circulación, así que, tanto el ejercicio físico como la posterior relajación y estiramiento de los músculos serán beneficiosos.
Soluciones en la alimentación
Ya entrando en las prácticas dietéticas, ingerir líquidos es una de las recomendaciones principales. Cualquier bebida natural es recomendable, sobre todo agua y zumos, pero, además existen determinadas infusiones especialmente beneficiosas. La salvia es una gran aliada de la mujer. Alivia los dolores menstruales y las molestias de la menopausia. Es antiinflamatoria y diurética, y tiene un excelente efecto sobre la circulación. Beberla durante el día y/o utilizarla como condimento en las comidas nos reportará grandes beneficios.En la lucha contra la celulitis podemos optar por prevenir su aparición, deshacernos de ella una vez presente o ambas. La prevención es relativamente fácil siempre que cumplamos unas normas básicas. En primer lugar debemos llevar una alimentación equilibrada, sin excesos de grasas, sobre todo saturadas que tienden a acumularse en los vasos sanguíneos y dificultan la circulación.
Un especial cuidado requieren las cenas ya que, a la hora de dormir, tendremos muchas horas de reposo en las que quemaremos una mínima parte de lo ingerido. Por ello, lo mejor es hacer caso del refrán popular ¿desayunar como un rey, comer como un príncipe y cenar como un pobre¿.
También hemos de prestar atención al consumo de azúcares, porque, éstos pueden ser la materia prima para la fabricación de la grasa, siempre que no sean quemados en su totalidad.
Algunos trucos
Una dieta rica en determinados minerales nos ayudará a deshacernos de la celulitis. Por ejemplo, una buena oxigenación de los tejidos con el suficiente hierro es necesaria para quemarla. Encontraremos altas dosis de este mineral en verduras de hoja verde como espinacas y acelgas, legumbres, huevos (especialmente en la yema), mejillones, frutos secos y algas, que son riquísimas en muchos minerales que, en ocasiones, son escasos en productos de la tierra.Una práctica muy importante, como ya se he mencionado anteriormente, es beber abundante agua; pero también es esencial deshacernos de la que nos sobra. Y para ello debemos llevar a cabo una dieta muy diurética. El potasio, por ejemplo, es un excelente diurético.
Lo encontramos en muchos alimentos, pero destacan por su alto contenido la calabaza, la endibia, el apio, el puerro, los espárragos, la levadura de cerveza y las pipas de girasol sin sal. Se debe reducir el consumo de sal si queremos evitar la acumulación líquido. Todos estos alimentos ricos en potasio son además muy beneficiosos para los hipertensos.
Una dieta contra la celulitis
Aglutinando todos los consejos y alimentos recomendados, a continuación te proponemos un ejemplo de menú anticelulítico ideal. No olvides que es adecuado que contrastes nuestras recomendaciones con las indicaciones de tu médico.Almuerzo
Espinacas salteadas con jamón.
Pescado a la plancha.
Fruta fresca (fresas, kiwi, piña, mandarina) o frutas secas (orejones, higos secos).
Cena
Crema de calabacín, puerro.
Mejillones al vapor.
Yogur o cuajada o queso fresco.
De este menú se deducen las siguientes claves, que son los pilares sobre los que asentaremos una dieta para combatir la celulitis:
Fruta y verdura en abundancia.
Hervido, cocido, a la plancha¿mucho mejor que frito.
Alimentos ricos en minerales en todas las comidas (queso, frutas secas, legumbres, jamón, productos de mar).
Especialmente en ayunas actuará como excelente diurético y purificador del organismo beber agua o zumo de frutas.
Reducir las cantidades de hidratos y grasas en general, de ahí que aumente el número de verduras.