A menos de dos semanas para Semana Santa llegan a nuestras cocinas los olores típicos de esta época, canela, limón, anís..... Y hoy la receta huele a canela y limón, pero con una peculiaridad, y es que no lleva azúcar, para hacerla apta para diabéticos y para reducir calorías a los que no lo somos.
En lugar del azúcar he puesto Stevia granulado (de la marca Truvía de Azucarera Española, por si queréis tener el referente). La verdad es que viendo recetas para diabéticos no aparece nada claro la cantidad de edulcorante, sea uno u otro, a añadir a las recetas, por lo que he tenido que ir probando y, con mi receta base de natillas, publicada en el blog en el principio de los tiempos, he realizado esta prueba. El resultado ha sido satisfactorio, no se puede comparar con las natillas con azúcar, el sabor cambia, sin perder la esencia de la canela , pero da la sensación de que le falta algo de azúcar y luego cuando terminas de comerlo se queda un retrogusto dulce, por lo que yo no añadiría más de la cantidad de stevia que os voy a poner, aunque eso es cuestión de gustos, claro.
INGREDIENTES:
1 litro de leche entera
6 yemas de huevo
2 cucharadas soperas de Maizena
La peladura de un limón
1 rama de canela
20 gr. de Stevia granulada
Canela molida
PREPARACIÓN:
Separamos medio vasito de leche y el resto lo ponemos a calentar junto con la rama de canela y la peladura del limón, cuando se caliente añadimos las stevia y seguimos calentando sin que llegue a ebullición.
En un bol batimos las 6 yemas de huevo junto con la leche que teníamos reservada, añadimos la Maizena y mezclamos todo con un batidor de varillas.
Vertemos poco a poco en el cazo y seguimos removiendo, al fuego, con el batidor de varillas, estaremos durante unos diez minutos hasta que se espese ligeramente las natillas (las he dejado sueltecitas, no muy espesas, ya que luego espesan en la nevera). Sacamos del cazo, quitamos la peladura del limón y la canela y vertemos en cuencos. Tapamos con film transparente y dejamos enfriar a temperatura ambiente. Luego llevamos al frigorífico hasta que se enfríen totalmente y servimos espolvoreando con canela molida.
Tan sencillo como eso. Esta receta si se hace con azúcar lleva 300 gr. de azúcar, por si queréis preparar las dos variantes. Con cualquiera de ellos triunfaréis, seguro.
Feliz jueves.
Fuente: este post proviene de Atrapada en mi cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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