En esta ocasión, os presento una sencilla y deliciosa receta, donde combinamos el delicioso sabor de unas simples alcachofas, acompañadas de unas gambas peladas congeladas y un poco de queso, además esta receta se puede preparar con antelación y solo hay que darle un golpe de horno antes de servir.
Ingredientes (2 personas):
6 alcachofas de tamaño parecido
1 cebolla
2 puñaditos de gambas peladas congeladas
4 ajos
1 cucharada sopera colmada de sémola de maíz (maicena)
Leche
Nuez moscada
Aceite de oliva
Perejil fresco
Sal
Preparación:
La mejor forma (para mi gusto) de cocer verduras es al vapor, así se controla mejor el grado de cocción y además, se pueden cocer varios ingredientes a la vez.
Por ello, coceremos al vapor nuestras alcachofas enteras, una vez cocidas (cuando estén tiernas, unos 45 minutos), las dejamos enfriar y les quitamos las hojas duras, dejándoles la parte más tierna del rabo que es tan deliciosa como el quesito.
Cortamos las puntas de las hojas de las alcachofas y las abrimos en dos.
Mientras pelamos y troceamos en juliana la cebolla.
Pelamos y fileteamos los ajos.
En un sartén con aceite de oliva freímos la cebolla y el ajo, cuando esta tierna la cebolla, agregamos las gambas peladas sin descongelar.
Le damos unas vueltas hasta que las gambas se cocinen y agregamos la cucharada de sémola de maíz.
Damos unas vueltas, sazonamos con sal y nuez moscada, vamos agregando leche hasta obtener una bechamel de la consistencia deseada.
Colocamos las mitades de alcachofas en platos aptos para el horno y cubrimos con esta bechamel.
Espolvoreamos con abundante queso parmesano rallado.
Colocamos unos 15 minutos en el horno a unos 160º a partir de horno frío.
Gratinamos unos 10 minutos, hasta que el queso se dore.
Espolvoreamos con perejil picado fresco, antes de servir.
Servir muy calentitas.