Hoy es el National Bundt Cake Day, esto quiere decir que hoy vais a ver Bizcochos horneados en molde de Bundt por doquier.
Así que aquí tenéis mi aportación un chocolatoso y jugosísimo Bundt de chocolate y calabacín.
En casa no duró ni un suspiro, todo el mundo quería su trozo y fue cayendo entre el desayuno y la merienda.
A mi hija mayor y a mi marido les gusta mucho merendar un buen bizcocho casero, así que procuro tener alguno siempre.
El chocolate con su sabor extraordinario y el calabacín aportando mucha humedad hacen de este Bundt algo sensacional, además de bastante sano.
Ya sabéis que las verduras en la repostería van fenomenal porque le aporta una jugosidad y humedad extra al bizcocho, como la calabaza como podéis ver en este Bundt de Calabaza relleno de queso, la zanahoria también aporta este extra de liquido como en estos Cinnamon Rolls de Zanahoria.
Por no hablar de la manzana o del plátano, en fin que yo creo que un Bundt o Bizcocho con fruta o verdura gana muchísimo.
Algunos de vosotros que no tenéis este tipo de molde, me preguntáis si podéis hacerlo en cualquier otro molde, la respuesta es Si. Podéis hacerlo tanto en un molde de pan alargado y alto como en un molde desmoldable de unos 23 cm.
Un Bundt no es más que un buen bizcocho vestido de fiesta.
Es verdad que el hecho de llevar el tubo central hace que se horneé mucho mejor por el centro, pero lo que te quiero decir es que si ves una receta de Bundt que te pirra, y no tienes este tipo de molde, que eso no te pare para hacer la receta.
La receta es de mi querido Iñaki Jaleo en la Cocina
¿Que os voy a decir de él? Pues que es un amor de persona y además excelente cocinero, el ha sido uno de los ganadores de Bloguero Cocineros de Canal Cocina, elegido por los compañeros blogueros ¿que mas se podría decir de el?
Así que como tenía calabacines y me apetecía mucho hacer este Bundt, en cuanto vi que el tenía la receta no lo dudé ni un segundo.
INGREDIENTES:
Para el bundt:
Para un molde de 10 tazas
70 ml de aceite de oliva suave
120 gr de azúcar moreno
200 gr de azúcar blanco
350 gr de harina
3 Huevos
Una pizca de sal
250 gr de calabacín
Dos cucharaditas de levadura
Una cucharadita de bicarbonato
Una cucharadita de vainilla
60 gr de cacao puro sin azúcar
120 ml de leche
Para la ganache:
75gr de chocolate
75gr de nata (crema de leche)
20 gr de mantequilla
ELABORACIÓN:
Precalentamos el horno a 180gr.
Rallamos el calabacín y reservamos.
Asegúrate de que el molde esta bien limpio sin resto de grasa y seco.
Engrasamos bien nuestro molde, yo uso espray desmoldante y no suelo tener problemas, reparte bien por todas las hendiduras del molde.
Tamizamos los ingredientes secos, es decir, la harina, la levadura, el bicarbonato, la sal y el cacao puro sin azúcar y reservamos.
A parte en otro bol, vamos batiendo con la ayuda de unas varillas manuales el azúcar con el aceite, después incorporamos los huevos uno a uno, sin añadir el siguiente hasta que el anterior esté bien integrado, añade aquí también la vainilla y el calabacín.
Ahora vamos a añadir los ingredientes secos y la leche a la mezcla anterior. Lo haremos en varias tandas, alternando la mezcla de harina con la leche, comenzamos con la harina y terminamos con la harina. Es decir la harina en tres veces y la leche en dos.
Mezclamos, más que batir, lo haremos hasta que veamos que la harina esta justo integrada, si nos pasamos de batido, se desarrollará el gluten de la harina y el bizcocho nos quedará gomoso.
Distribuimos la masa por todo el molde, ponemos un trapito de cocina sobre la encimera y damos unos ligeros golpecitos para ayudar a la masa a distribuirse por todas las hendiduras. Lo ideal es echar la masa por un lado del molde y que ella sola se distribuya por las hendiduras.
Horneamos durante unos 45/50 minutos o hasta que al insertar una brocheta esta salga limpia.
Dejamos enfriar sobre una rejilla unos 10 o 15 minutos, veremos que el bizcocho ha encogido y se despega del molde.
Podemos dar, con cuidado, unos meneos al molde sobre un trapito para ayudar a terminar de despegarse y poder comprobar que esta suelto.
Desmoldamos sobre una rejilla y dejamos enfriar.
Cuando ha pasado un ratito y esta todavía calentito, pero ya lo puedo manejar, lo envuelvo en film y lo guardo en la nevera, ya que así atrapamos la humedad que se evapora y se queda dentro del bizcocho que es donde debe estar…jeje.
Mientras se enfría el bundt podemos hacer nuestra ganache.
Picamos el chocolate y calentamos la nata (crema de leche) hasta que casi empiece a hervir, volcamos sobre el chocolate y esperamos unos minutos, pasado ese tiempo comenzamos a remover hasta integrar.
Agregamos la mantequilla y mezclamos.
A los 15/20 minutos podríamos verterla sobre el bundt o bizcocho, para que chorreé, haz una prueba y si ves que esta muy liquida espera otros minutillos y si ves que esta muy densa caliéntala otro poco.
Estos bizcochos, de un día para otro es cuando mejor están, se asientan y ganan en sabor y aromas…si podéis esperar claro.
Un bundt delicioso y listo para desayunar o merendar y hacer la delicia de todos en casa.
Si tenéis alguna duda me la podéis dejar aquí en el blog o en alguna de mis redes como mi página de FB o mi IG.
Si haces el bizcocho ¡no te olvides de mandarme foto!
Yo sigo a vueltas con la cocina, podéis seguir la aventura en los Stories de Instagram, me pregunta tanta que gente, que no se si hacer un post para contároslo todo y enseñárosla…jejejeje.
Como siempre os dejo con el verdadero pedacito de cielo:
Poned todas vuestras preocupaciones y ansiedades en las manos de Dios, porque el cuidad de vosotros. 1ª de Pedro 5:7
Se os quiere.
¡Gracias por estar al otro lado!