Que ganas tenía de preparar este pastel Boston Cream Pie pero por H o por B nunca se había presentado la oportunidad de hacerlo.
Es una combinación maravillosa, porque el bizcocho denso va a la perfección con el relleno, generalmente crema pastelera, ahora os cuento con que he rellenado yo, porque le aporta mucha jugosidad y se complementa maravillosamente bien. Si coronamos con una ganache de chocolate la combinación es insuperable.
En esta ocasión he usado las Natillas de Postres Goshua, pero de las de vedad, las que se elaboran con leche y huevos frescos. La grandeza de las natillas está en la sencillez bien entendida y en una cuidada elaboración para conseguir un postre tan auténtico como tradicional. Con vainilla o caramelo, son un regalo para los sentidos.
Así son los Postres de Goshua: sin conservantes ni colorantes artificiales, sin gluten. Elegir lo natural y seleccionar cuidadosamente materias primas de primera calidad define nuestra forma de elaborar cada receta desde 1960.
Lo único que he tenido que hacer ha sido hidratar unas hojas de gelatina para que las natillas cogieran un poco de cuerpo y poder rellenar nuestro pastel.
Deciros que en casa me hicieron la ola y que están deseando que lo repita, aunque eso no es cosa fáciljejejeje.
Vamos con la receta:
Ingredientes:
Bizcocho:
Para dos moldes de 18 cm
225 g de harina de todo uso
15 g de impulsor químico
1 pizca de sal
150 g de Leche entera
3 huevos L
200 g de azúcar.
225 g de mantequilla.
1 cucharadita de esencia de Vainilla.
Relleno:
Dos natillas al caramelo Goshua
4 hojas de gelatina hidratadas y escurridas
Ganache de chocolate:
75 g de chocolate negro
75 g de nata (crema de leche) con un 35% de materia grasa
15 g de mantequilla
Elaboración:
Precalentamos el horno a 180º C calor arriba y abajo.
Tamizamos la harina, el impulsor químico y la pizca de sal, reservamos.
Batimos la mantequilla en punto pomada junto con el azúcar hasta que blanqueen con la ayuda de una batidora, después añadimos lo huevos uno a uno.
Alternamos la mezcla de harina con la leche, comenzando por la harina y terminando por la leche.
Engrasamos los moldes y ponemos un disco de papel en la base, horneamos 30/35 minutos o hasta que al insertar una brocheta esta salga limpia.
Dejamos enfriar unos 10 o 15 minutos, desmoldamos, envolvemos en film y reservamos en la nevera.
De la crema de natillas:
Ponemos a hidratar 4 hojas de gelatina en agua fría durante 5/10 minutos.
Escurrimos bien y ponemos en un bol pequeño, llevamos al microondas unos segundos, los justo para se funda la gelatina sin llegar a calentarse mucho.
Rápidamente se la incorporamos a las natillas y removemos enérgicamente para integrar la gelatina en las natillas y que no queden bolitas de gelatina en la mezcla.
Ponemos en una manga pastelera con una boquilla redonda de 1cm y la reservamos en la nevera unas 4 horas hasta que veamos que ha cogido cuerpo.
De la Ganache de Chocolate:
Picamos el chocolate y ponemos la nata (crema de leche) al fuego, cuando rompa a hervir la vertemos sobre el chocolate picado, esperamos un par de minutos y removemos bien. Añadimos la mantequilla y mezclamos.
MONTAJE:
Nivelamos los bizcochos si hiciera falta, ponemos un primer bizcocho, rellenamos con la crema de natillas, cubrimos con el otro bizcocho.
Napamos con la ganache de chocolate dejándola caer sobre el bizcocho y alisándola con una espátula pequeña acodada hasta que caiga por los laterales un poquito.
Espero que disfrutéis mucho este pastel, tanto como nosotros en casa.
Se os quiere.
Fuente: este post proviene de Un pedacito de cielo, donde puedes consultar el contenido original.
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