Para realizar postres fáciles y ricos no es necesario complicarse mucho la vida, en esta ocasión utilice un soplete de cocina para quemar el azúcar, pero si no tenéis soplete podéis sustituir el azúcar por caramelo líquido o miel, por ejemplo.
También mi idea era decorarlo con una cereza confitada en el centro, colocándola sobre el azúcar quemado, pero como no tenía le puse un trocito de naranja confitada, que también esta rica, pero hace menos bonita la presentación.
Ingredientes (2 personas):
1 plátano maduro
1 boniato cocido pequeño
1 yogurt natural sin azucarar
2 trocitos de naranja confitada
1 trozo de ciruela verde confitada
2 cucharadas soperas de azúcar
Preparación:
Pelamos y troceamos a datitos pequeños tanto el plátano como el boniato.
Repartimos los daditos entre dos recipientes.
Cubrimos el plátano y el boniato con el yogurt, repartiendo este entre ambos recipientes.
En el centro de cada plato colocamos una cucharada de azúcar, la cual quemaremos con el soplete de cocina, para que el azúcar nos quede caramelizado.
Decoramos con la naranja confitada y la ciruela cortada a trocitos pequeñitos.
Guardar en el frigorífico hasta el momento de servir.