Me encanta todo lo que tenga que ver con dulces del tipo seco, es decir, masas y bizcochos, hojaldres o panes dulces. Pero lo que de verdad me encanta es el chocolate. Por eso la receta de hoy es una de mis preferidas, un bundt cake de chocolate y almendra jugoso y denso a la vez, con intenso sabor a chocolate.
En mi opinión la combinación de chocolate con almendra es perfecta. La almendra le da un punto de sabor y textura al bizcocho que no puede estar más bueno. Si sois aficionados a hacer bizcochos en casa os recomiendo que os hagáis con alguno de los moldes de Nordic Ware. Podréis preparar vuestros dulces preferidos y que os queden con un acabado increible. No son súper baratos, pero vale la pena, los resultados son unos bizcochos perfectos.
RACIONES: 12
TIEMPO: 20 minutos + 60 minutos de horno
DIFICULTAD: baja
BUNDT CAKE DE CHOCOLATE Y ALMENDRA:
180 gr. HARINA TRIGO
100 gr. ALMENDRA MOLIDA
60 gr. CACAO PURO, SIN AZÚCAR
110 gr. MANTEQUILLA
380 gr. AZÚCAR
4 HUEVOS
200 gr. LECHE ENTERA
30 gr. ZUMO DE LIMÓN
90 gr. ACEITE DE GIRASOL
1 cdita. ESENCIA DE VAINILLA
1 cdita. LEVADURA
1/2 cdita. BICARBONATO
1/2 cdita. SAL
1.- Comenzamos preparando lo que será un buttermilk casero. Ponemos la leche en una taza y añadimos el zumo de limón. Veremos como la leche irá adquiriendo una textura distinta, como si estuviera cuajándose. Dejamos reposar la mezcla hasta el momento de utilizarla.
2.- Ponemos la mantequilla y el azúcar en un bowl y batimos la mezcla con la ayuda de una batidora o robot de cocina. Es imprescindible que la mantequilla esté a temperatura ambiente, con textura de pomada, para conseguir una crema perfecta.
3.- Añadimos los huevos, uno a uno, batiendo de nuevo la mezcla antes de añadir el siguiente. Agregamos la esencia de vainilla y el aceite de girasol y mezclamos bien.
4.- En un bowl combinamos los ingredientes secos restantes, la harina, la almendra molida, la levadura, el bicarbonato, la sal y el cacao. Añadiremos, alternativamente, el buttermilk y la mezcla de la harina a la mantequilla y huevos. Primero un tercio de la harina y mezclamos, luego la mitad del líquido y volvemos a mezclar, y así sucesivamente hasta haber incluido todos los ingredientes.
En este punto es importante no batir la mezcla, se trata de combinar los ingredientes, no de batirlos.
5.- Mientras el horno se precalienta a 180ºC, untamos nuestro molde con mantequilla. Podemos derretir una cucharada de mantequilla en el micro y, con un pincel de cocina aplicarlo por toda la superficie del molde. Vertemos la mezcla en el molde ya untado y horneamos durante unos 50 o 60 minutos. Comprobaremos que el bundt cake esté listo pinchándolo con un palito. Cuando este salga limpio podremos retirar el molde del horno.
6.- Dejamos que el molde se vaya enfriando sobre una rejilla 15 minutos antes de desmoldar el bizcocho. Este punto es muy importante. Si no esperamos este tiempo, el bundt cake podría romperse al desmoldarlo. Si esperamos mucho más de 15 minutos para desmoldarlo, podría pasar que tengamos dificultades para que se despegue de las paredes.
Dejamos que se enfríe totalmente sobre la rejilla, una vez desmoldado, antes de disfrutarlo.
Fuente: este post proviene de Galletas para Matilde, donde puedes consultar el contenido original.
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