Os explico el paso a paso que ya veréis lo sencillo que es y lo que vais a disfrutar preparándolos y más aún degustándolos.
INGREDIENTES
1 paquete de galletas Oreo
150 gr de harina de trigo común todo uso
1 cucharadita de levadura química (polvos de hornear)
1 huevo
125 ml de leche
1 yogur
25 gr de mantequilla
1 cucharadita de azúcar vainillado o de extracto de vainilla
un poquito de sal
PREPARACIÓN
En un bol grande vamos a ir añadiendo los ingredientes y líquidos y batiéndolos, comenzamos con el huevo, seguido del yogur, la leche,la mantequilla previamente derretida y la vainilla. Batiremos hasta conseguir una mezcla homogénea.
A continuación le agregaremos los ingredientes secos, la harina tamizada, la sal y la levadura.
A continuación le agregaremos los ingredientes secos, la harina tamizada, la sal y la levadura. Mezclamos enérgicamente todos estos ingredientes hasta que la masa esté lista.
Bañamos las galletas en la masa de una en una, escurrimos el exceso dándole unos golpecitos para que al freírlas tenga una forma redondita más bonita. Los freímos por tandas en abundante aceite caliente.
Una vez fritos los sacamos a un plato con papel absorbente para quitarles el exceso de aceite. Por último, los podemos decorar con una generosa capa de azúcar glass.
A mis niños les encanta cuando algunos domingos por la mañana los despierta el dulce y agradable olor que desprenden estos buñuelos de Oreo cuando los fríes, se ponen tan contentos que es difícil que esperen a que se enfríen un poquito para comérselos. Aunque os recomiendo que los comáis cuando estén templados porque recién hechos es cuando más buenos están.