Lleva 2 plátanos bien maduros, de los que simplemente con el tenedor se chafan, el yogur puede ser natural o de plátano pero yo el que tenía era de chocolate.
Se puede hacer con aceite de oliva pero yo he preferido en este caso poner mantequilla para que mi amiga no notara ningún gusto extraño a su paladar, ellos no toman aceite de oliva y menos en un cake, je, je.
Yo lo he hecho con harina bizcochona, de la que ya lleva impulsor, por eso he añadido un poquito pero si lo hacéis con harina normal de la de todo uso mejor poned un sobre de levadura tipo Royal. No sé si es por la mantequilla o por la harina bizcochona pero la textura quedó perfecta.
Ingredientes:
4 huevos.
100 grs. de azúcar blanco.
100 grs. de azúcar moreno.
1 c. de extracto de vainilla.
2 plátanos maduros.
1 yogur de chocolate.
125 grs. de mantequilla.
180 grs. de harina para bizcochos.
30 grs. de cacao puro.
4 grs. de Levadura Royal.
Un pellizquito de sal.
Un puñadito de nueces peladas.
Como es muy fácil y se prepara muy rápido encendemos el horno para que vaya cogiendo temperatura. A mí me gusta ponerlo a 200 grados pero cuando meto el cake lo bajo a 180.
Tamizamos la harina, el cacao, la sal y el impulsor.
Fundimos la mantequilla en el microondas.
Montamos los huevos con los 2 tipos de azúcar y la vainilla hasta que dupliquen el volumen. Cuando la mezcla esté blanquecina y cremosa se añade la mantequilla fundida y el yogur. Pelamos los plátanos, los chafamos con un tenedor y los incorporamos a la mezcla y se vuelve a batir para unificarlo todo y sacamos la batidora. Ahora con una lengua de silicona incorporamos los ingredientes secos que los tenemos tamizados y removemos con cuidado hasta que no queden grumos de harina.
Engrasamos un molde con aceite o mantequilla, volcamos la mezcla en él y colocamos las nueces partidas por encima, el horno las tostará y quedarán crujientes.
Lo metemos en el horno entre 50 y 60 minutos, cuando pinchemos el centro si la brocheta sale limpia ya lo tenemos, si no lo dejaremos 5 minutos más.
Lo sacamos a una rejilla para que enfríe y cuando esté a temperatura ambiente lo desmoldamos. Ya veréis cómo huele y qué sabor!
Bye.