Para realizar esta receta he usado como siempre Plátanos de Canarias, los de mi tierra que sin duda son exquisitos. Y he sustituido la buttermilk por leche con unas gotas de jugo de limón, tu puedes usar buttermilk o preparar el sustituto como yo.
Esta receta la vi en el blog Ma petite boulangerie ya muchos saben los panes estupendos que prepara esta chica, pues los dulces también son deliciosos, con la cantidad de azúcar justa, sin pasarse tal y como a mi me gusta.
Ingredientes:
250 ml. de leche (o 250 ml. de buttermilk)
Unas gotas de zumo de limón
250 g. de harina todo uso
80 g. de cacao en polvo
1 cucharadita de levadura química (polvo de hornear)
1/2 cucharadita de bicarbonato sódico
1 pizca de sal
1 cucharadita de azúcar vainillada
110 g. de mantequilla
150 g. de azúcar blanquilla
4 huevos
300 g. de plátanos maduros ya pelados
Un poco más de mantequilla para engrasar el molde
Una cucharada de harina para espolvorear el molde
Elaboración:
Comenzamos preparando el sustituto de buttermilk, vertiendo una cucharadita de zumo de limón en la leche y dejando quieto que repose durante unos 10 minutos.
Engrasamos un molde de corona con mantequilla o aceite y espolvoreamos con un poco de harina.
Calentamos el horno a 180 º C con calor arriba y abajo.
Tamizamos la harina, el cacao en polvo, la levadura y el bicarbonato y reservamos.
Pelamos los plátanos maduros y los escachamos con un tenedor. también reservamos.
En un bol batimos la mantequilla junto con el azúcar blanquilla Amagoldi y el azúcar vainillado hasta que la veamos cremosa.
Añadimos los huevos uno a uno, mezclando bien antes de integrar el siguiente.
Incorporamos los plátanos y la pizca de sal y mezclamos.
Añadimos la mitad de la harina junto con el cacao tamizados y mezclamos, luego incorporamos la buttermilk y mezclar.
Por último añadimos el resto de la harina y otros sólidos y mezclamos justo hasta que se incorporen, no batir en exceso.
Volcamos la mezcla en el molde de corona y levantamos el molde unos dos centímetros de la encimera y lo soltamos, estos pequeños golpes es para evitar que se formen burbujas de aire en el bizcocho.
Introducimos el molde en el horno caliente a 180 º durante 45 o 50 minutos, hasta que al introducir un palillo este salga limpio.
Cuando el bundt cake esté hecho retíralo del horno y coloca el molde sobre una rejilla a enfriar unos 10 minutos, después desmolda el bundt cake y déjalo enfriar por completo.
Una vez frío espolvoréalo con azúcar glass. ¡ Y a comer!
Deseo de todo corazón que disfrutes de esta receta con tu familia y que estos dulces momentos sean los que recuerdes al final del día. ¡Feliz fin de semana amigos!
Fuente: este post proviene de Comedere Panis, donde puedes consultar el contenido original.
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