En mi viaje a Londres, del que ya os he hablado, me he traído en la memoria y en el paladar los sabores que he probado.
Ya os he puesto un par de recetas los champiñones de Jamie Oliver y el Apple Pie. Hoy os traigo algo que no es ni siquiera una receta como tal, pero que a mi me encantó cuando lo probé.
Como soy la tonta del queso, en un pub donde nos sentamos a comer, tenían este entrante y no me pude resistir a probarlo.
Aqui podeis ver como nos presentaron el plato
Ya sabía lo que me iba a encontrar, no es nada novedoso, queso fundido y punto. Pero la manera de presentarlo y lo que lo acompañaba me encantó. Así que os lo dejo para que lo tengáis en cuenta por si queréis prepararlo.
INGREDIENTES:
1 queso camembert
1 pepino
1 zanahoria
1 bastoncitos de pan o tostas
cebolla caramelizada
PREPARACIÓN:
Vamos a cortar el queso en cuatro partes sin llegar hasta el final. Lo ponemos en un papel de horno y horneamos a 180º hasta que veamos que se ha fundido. Alrededor de unos 15 o 20 minutos.
Mientras tanto lavamos y pelamos el pepino y la zanahoria y lo hacemos bastoncitos.
Preparamos el pan, podemos usar picos o barritas tostadas, o bien preparar unos crutones de pan de molde casero que hornearemos hasta que se doren.
una vez que el queso se haya fundido, preparamos una bandeja con los bastoncitos de verdura, los palitos de pan tostado y un cuenco con cebolla caramelizada. Servimos caliente.
Cortamos el queso en cuatro porciones, sin llegar hasta abajo. Lo horneamos sobre un papel vegetal hasta que se funda.
Yo preparo mis crutones caseros cortando palitos de pan de molde, los horneo hasta que están dorados, así aprovecho el pan que tengo.
Y preparamos nuestro entrante, acompañado de verduras crudas, pan tostado y cebolla caramelizada.
Ya sea con pan o con las verduritas, es un aperitivo riquísimo. Importante servirlo recién salido del horno.
Fuente: este post proviene de Tapitas y postres, donde puedes consultar el contenido original.
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