El queso se hornea lo justo para que se funda el interior y se mezcle con la mermelada en una asociación histórica. Los dos dan lo mejor de sí mismos y se dejan querer por todo tipo de panes y tostaditas.
Es fácil, es rápido y es exquisito, merece la pena probarlo con mermelada de violetas porque sus matices son muy delicados pero también puedes probar con otras mermeladas o con miel. La combinación del queso fundido y cremoso con el toque dulce es verdaderamente memorable.
En este caso lo hemos presentado con mini tostas comerciales, pruébalo con el pan que más te guste, quedará genial.
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Ingredientes para 4 personas:
1 queso Camembert
1 cucharada sopera de mermelada de pétalos de violeta
Preparación:
Calentamos el horno a 150ºC.
Desenvolvemos el queso Camembert y lo devolvemos a la base de su caja de madera. Hacemos dos cortes en la superficie de 1 cm de profundidad en forma de cruz.
Distribuimos una cucharada sopera de mermelada sobre la superficie del queso.
Introducimos el queso dentro de la base de la caja sobre la rejilla del horno durante 10 minutos. Importante no pasarse del tiempo o reventará.
Sacamos el queso del horno, rompemos la caja para pasarlo a una tabla y servimos con nuestro pan favorito.
Queda espectacular servirlo con un corte como en la foto de arriba para que se derrame un poco el interior. ¿Esto es lo que se llama porn food?
Servimos con tostaditas.
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Importante: no llevamos comisión, ¡nos caen bien estos chicos!
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