La Carrot Cake es una de esas tartas que enganchan por su textura suave y su ligero aroma a canela, Ocurre un poco como con la Tarta de Mahonesa chocolate y (que no es más me mezclar bien los huevos con el aceite) o el Brownie de remolacha cuando das el nombre muchos dan un pasito atrás pero aquellos valientes que la prueban... ya no la olvidan.
En 1998 probé mi primera Carrot Cake (con gluten), fue una experiencia inolvidable ya que aún recuerdo el año... empecé a buscar por todas partes recetas de la Tarta de Zanahoria (antes libros y revistas), con pocos resultados, pero allí llegó Google (del que no hace tanto) y después de buscar un artículo de Neuropsicología mi segunda búsqueda fue la receta de la Tarta de Zanahoria (de las que había muy poquito). Tengo que reconocer que en los primeros intentos no conseguí una tarta que me gustara demasiado, estaban ricas pero no tanto como la aquella tarta de zanahorias que probé por primera vez. Desde entonces Carrot Cake al canto, las primeras con gluten las siguientes sin gluten, he probado recetas nuevas, antiguas, novedosas, las mejores y hasta las peores, ninguna como aquella Carrot Cake, sé que también tiene que ver en este aspecto de nuestro cerebro que tiende a hacer superlativo... todo un poquito.
Después de muchas Carrot Cakes, puedo afirmar y afirmo que esta es la más parecida a lo que quería, deseaba, había subliminado en mis pensamientos o esperaba encontrar (y sigo perfeccionándola... porque todo en esta vida se puede mejorar).
8 porciones
Dificultad media
1 hora
CARROT CAKE SIN GLUTEN
Ingredientes:
Tarta de 20 cm de diámetro
- 200 gr de zanahorias limpias
- 100 gr de harina de arroz
- 75 gr de maicena
- 1 cucharada rasa de cacao en polvo (opcional)
- 2 huevo L
- 140 gr de azúcar
- 1 sobre de azúcar avainillado (8 gr) o una cucharadita de esencia de vainilla
- 180 gr de de aceite de maíz o girasol
- 1 cucharada de levadura química
- 1 cucharada de bicarbonato
- 1 cucharada generosa de canela en polvo
- 1 cucharada de jengibre en polvo
- Un puñado de nueces
- Un puñado de pasas sultanas
- Una pizca de sal
Crema de queso:
- 200 ml de nata (crema de leche) al 35% de M.G muy fría
- 1 cucharada generosa de queso crema
- 3 cucharadas de azúcar.
Otras:
- Mitades de nueces
- Chocolate picado
Elaboración:
Para el bizcocho de zanahoria:
1. Precalienta el horno a 180ºC.
2. Limpia las zanahorias y pésalas. Puedes procesarlas sin batirlas demasiado en un procesador de alimentos o rállalas. Reserva.
3. Mezcla los huevos, el azúcar, la vainilla. cuando estén bien incorporados añade el aceite y las zanahorias. Mezcla bien hasta que la masa esté homogénea.
4. Añade tamizada las harinas, junto al cacao, si se lo pones, la levadura y el bicarbonato, la sal, la canela, el jengibre, las pasas y las nueces groseramente machacadas.
5. Engrasa un molde de 20 cm de diámetro, hornea unos 45 minutos a 180ºC
6. Comprueba que esta cocinada pinchando con un palito en el centro.
7. Sácala del horno, deja reposar unos minutos. Desmolda y pon sobre una rejilla deja enfriar por completo. Puedes envolverla en film transparente y dejarla en la nevera medio día o una noche, está mucho mejor.
Para la crema de queso:
1. Bate la nata (crema de leche) y cuando esté casi montada, añade el queso en crema y el azúcar. Bate hasta montar bien sin que llegue a ser mantequilla.
Montaje:
1. Divide el bizcocho en dos discos, aunque si te resulta más fácil usa dos moldes iguales.
2. Rellena con una capa generosa de crema de queso, Cubre con la otra parte del bizcocho y decora con la crema y unas mitades de nueces o chocolate troceado.
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