Hoy traemos de nuevo una receta ligera.
Ligera, fácil y rica. Una tarta de queso con fresas sin azúcar baja en calorías. Un tesoro para disfrutar sin remordimiento.
Los ingredientes que vamos a usar son sin azúcar y bajos en calorías, por lo que una porción razonable de este postre es algo totalmente permitido en una dieta.
Os dejo la receta para que os animéis a hacerla.
INGREDIENTES:
Para la base:
12 galletas tipo Maria 0% azúcares
40 ml de leche desnatada
Relleno:
500 gr de queso batido desnatado 0%
1 sobre de gelatina de fresa 0%
1 cucharadita de sacarina liquida
5 o 6 fresas
Cobertura:
3 fresas + 4 más para adornar
1 hoja de gelatina neutra.
PREPARACIÓN:
Comenzamos triturando las galletas en la thermomix 10 segundos a velocidad 10. Podemos hacerlo con una batidora. Añadimos la leche y mezclamos 10 segundos a velocidad 3. Ponemos esta mezcla en el fondo de un molde de 18 cm. He de advertiros que sale una pasta que cuesta extender. Pero con paciencia lo conseguiremos.
Dejamos enfriar en el congelador mientras preparamos el relleno.
Ponemos las fresas y las trituramos 10 segundos a velocidad 8-10. Añadimos 250 gr del queso batido desnatado, y el sobre de gelatina de fresa. Mezclamos 10 segundos a velocidad 3 y programamos 4 minutos, 70º y velocidad 2. Al acabar, agregamos el resto del queso batido desnatado y la cucharadita de sacarina liquida. Mezclamos de nuevo 10 segundos a velocidad 3.
Vertemos sobre la base de galletas y dejamos unas horas en la nevera para que cuaje.
Cuando la tengamos bien cuajada, haremos la cobertura. Ponemos la hoja de gelatina a hidratar en agua fría. Trituramos las tres fresas, esta vez he usado una batidora. Le añadimos la gelatina hidratada y escurrida y calentamos en el microondas 30 segundos. Mezclamos bien.
Partimos por la mitad las cuatro fresas y las colocamos sobre la tarta. Encima echamos la cobertura de fresa y gelatina. Dejamos en la nevera hasta que se cuaje, un par de horas más. Estas tartas es conveniente hacerlas el día anterior.
SIN THERMOMIX:
Trituramos las galletas con una batidora o con un rodillo y las mezclamos con la leche. hacemos una pasta y la ponemos en el fondo de un molde de 18 cm. Dejamos en el congelador un rato.
Ponemos las fresas del relleno en el vaso de la batidora y las trituramos. Las ponemos en un cazo amplio con la mitad del queso batido y el sobre de gelatina de fresa. Mezclamos bien y calentamos, sin que llegue a hervir hasta que veamos que se ha integrado todo bien. Añadimos ahora el resto del queso y a sacarina y removemos hasta que tengamos una crema fina y homogénea.
Vertemos en el molde y dejamos cuajar en la nevera.
Para hacer la cobertura seguid los pasos que indico mas arriba.
Trituramos las galletas
Las mezclamos con la leche y hacemos una pasta.
La ponemos en el fondo de un molde de 18 cm. Os advierto que es una pasta que cuesta extender. No os desepereis. Dejamos en el congelador.
Vamos con el relleno. Trituramos las fresas.
Este es el queso que uso.
Mezclamos las fresas, con la mitad del queso, y el sobre de gelatina. Calentamos.
Al acabar añadimos el resto del queso y la sacarina. Volvemos a mezclar bien.
Vertemos sobre la base de galletas. Dejamos en la nevera unas horas.
Vamos con la cobertura. Trituramos unas fresas.
Las mezclamos con la gelatina hidratada y calentamos unos segundos en el micro.
Ponemos mitades de fresas en la tarfa para adornar.
Echamos la gelatina encima y dejamos unas horas en la nevera.
Unas horas de nevera para que cuaje bien. Mejor hacerla el día antes.
¡Mirad que corte! una tarta que no te pesará comer por su ligereza.
Fuente: este post proviene de Tapitas y postres, donde puedes consultar el contenido original.
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