El conejo, al ser bajo en grasa y colesterol, es una carne muy recomendable en dietas bajas en calorías, también destaca por su alto contenido en proteínas de alto valor biológico, es decir, son fácilmente digeribles y asimiladas por nuestro organismo.
El conejo es fuente de vitaminas hidrosolubles del grupo B y destaca por su aporte de minerales como hierro, fósforo, magnesio, potasio, selenio y zinc entre otros. El bajo contenido en sodio junto con el considerable aporte de potasio puede otorgar a esta carne un papel positivo en la prevención y control de la hipertensión.
Como ya hemos adelantado, esta carne es fácilmente digerible por el organismo, ya que su bajo contenido calórico aproximadamente es de unas 135 kcal por 100 gr. y sus pequeñas dosis de sodio la convierten en una carne fácil de asimilar por el organismo, lo que ayuda a agilizar las digestiones y conseguir que el metabolismo funcione más deprisa y de forma más eficaz.
Esta carne nos ofrece infinidad de maneras de prepararla para obtener los mejores resultados y deberíamos de incluir este alimento en nuestra dieta familiar.
El hecho de que el conejo tenga poca grasa y su carne presente fácil digestibilidad, hace que su consumo sea muy adecuado en personas con un aparato digestivo delicado. Las actuales recomendaciones nutricionales, aconsejan el consumo de
A destacar:
o Es una carne magra y sabrosa que gustará a toda la familia.
o Es baja en calorías, grasa y fuente de proteínas, minerales y vitaminas.
o Tiene una gran versatilidad gastronómica, ya que admite una amplia variedad de formas de preparación y cocinado.
o Es una carne tradicional de nuestra cocina mediterránea que tenemos que recuperar incluyendo en la dieta semanal.
Para realizar esta receta vamos a utilizar nuestra olla de
Ingredientes:
· 1 conejo pequeño (1 ?
· 50 gr. de almendras.
· 1 cebolla pequeña (120 gr.).
· 1 ramita de perejil.
· 5 dientes de ajo pequeños.
· 125 ml. de vino blanco.
· 20 ml. de coñac o brandy.
· 1 cucharadita de pimentón.
· 6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
· Sal.
Elaboración:
a) Lo primero que haremos será cortar los ajos pelados en láminas y la cebolla en juliana, además de deshojar el perejil y lavarlo. A continuación poner la pieza a calentar y añadir el aceite, tapamos y cuando la franja roja este llegando a la figura del chuletón añadimos la cebolla, el ajo y el perejil para pochar. Bajamos el fuego dejando medio. Vamos destapando para darle vueltas y limpiando el interior de la tapadera del agua que se va acumulando. Cuando este pochado y haya tomado color añadimos las almendras y las sofreímos hasta que también tomen color las almendras. Sacamos el sofrito y lo colamos para ponerlo en un vaso batidor y pasar por la batidora, podemos añadirle un poco del vino para obtener una picada menos densa.
b) En el aceite del sofrito añadimos el conejo para sofreír bien, le ponemos sal y tapamos, esperar a que la franja roja llegue al 98 y le damos una primera vuelta para que se haga bien, y así vamos procediendo hasta que este bien sofrito por todas partes y se nos vaya quedando el pegadito en la base de la olla (no os preocupéis que cuando se le añade liquido despega todo).
c) Una vez sofrito el conejo añadir la cucharadita de pimentón, la picada con el ajo, la cebolla y las almendras sofritas, el vino y el coñac, remover y añadir agua hasta casi cubrir el conejo, nosotros le ponemos en nuestra olla aproximadamente 350 ml.
d) Tapar y programar el "audiotherm" 20 minutos en función cocer "zanahoria", ponemos el fuego al máximo y cuando la franja roja llegue a dicha función y nos avise, bajamos el fuego y esperamos esos minutos. Un detalle importante que hemos comentado en anteriores recetas es que cuando cocemos con la tapa bien puesta, no debe salir vapor, si sale es que la temperatura es demasiado alta y si estamos con el fuego al mínimo deberíamos de cambiar a otro fuego más bajo o si se trata de Vitro o navigenio apagaremos hasta que no salga. De todas formas nos lo avisa el "audiotherm" con un símbolo menos "-" parpadeando referido al control de la temperatura.
Solo nos quedara emplatar y servir nuestro conejo en salsa de almendras y acompañar de alguna guarnición; esta receta preparada para comer al día siguiente estará más sabrosa, ya que los sabores serán más intensos al estar reposando.