Esta receta me la ha pasado mi amiga Susana, que por problemas de intolerancias alimentarias debe cuidar mucho lo que come, así que ha tenido que reducir las grasas, los lácteos y otros alimentos.
La verdad es que son unas croquetas muy sanas, pero con una textura muy distinta a la que estamos acostumbrados. No lleva huevo, ni harina de trigo, por lo que freirlas es complicado (lo he comprobado) y aunque la receta original es horneada yo quería probar a ver como quedaban fritas. Mala idea.
Al horno salen bien, es una masa blanda, no quedan tan doradas ni bonitas como las fritas, pero mira, más saludables son, asi que eso ganamos.
INGREDIENTES:
1 bote de garbanzos cocidos (de unos 250 gr)
40 gr de espinacas frescas.
1 diente de ajo.
2 cucharadas de aceite.
1 pellizco de sal.
15 gr de pasas sultanas sin semillas.
5 gr de piñones.
Harina de garbanzos para rebozar.
PREPARACIÓN:
CON THERMOMIX:
Lavamos los garbanzos y dejamos que escurran.
Ponemos el aceite y el ajo picado en la thermomix y calentamos 5 minutos, 100º, velocidad 1.
Añadimos las espinacas y sofreímos 3inco minutos más, 100º, velocidad 1. Comprobamos que las espinacas están rehogadas, si no, las dejamos un par de minutos más.
Añadimos los garbanzos y trituramos 10 segundos a velocidad 7-10.
Agregamos las pasas y los piñones y trituramos un poco, 10 segundos a velocidad 8.
Dejamos la masa en la nevera una hora.
Con una cuchara hacemos porciones y las pasamos por harina de garbanzos.
En una fuente de horno, con papel vegetal pincelado de aceite, colocamos las croquetas y horneamos a 200º unos 1º minutos. Con cuidado, cuando veamos que está dorada, damos la vuelta y horneamos otros diez minutos por la otra cara.
SIN THERMOMIX:
Lavamos bien los garbanzos, y dejamos que escurran.
Ponemos el aceite en una sartén y sofreimos el ajo picado. Incorporamos las espinacas troceadas y la sal y rehogamos.
Cuando tengamos listo este sofrito añadimos los garbanzos, las pasas y los piñones y trituramos con una batidora.
Dejamos una hora en la nevera la masa.
Formamos porciones con una cuchara y rebozamos en harina de garbanzo.
Horneamos sobre una bandeja con papel vegetal a 200º unos diez minutos por cada lado.
Lavamos bien los garbanzos y los dejamos escurrir.
Sofreímos el ajo.
Agregamos las espinacas frescas.
Y las sofreímos.
Echamos los garbanzos.
Incorporamos las pasas y los piñones.
Ya está la masa, la dejamos enfriar.
Las pasamos por harina de garbanzos.
Damos forma de croquetas y las horneamos a 200º.
Aquí las tenéis, unas croquetas distintas a las de siempre.
Muy tiernas y suaves y con un sabor muy rico.
Si te gustan mis recetas compártelas en facebook.