Hola amig@s:
Aprovechando estas fiestas que se acercan paso a compartir con vosotros una rica receta de roscos tipicos y tradicionales navideños.
No sé si sabéis que tengo un blog de cocina y tampoco sé si se puede hacer publicidad de él, así que os estaría muy agradecida si me aclaráis ciertas dudas que aun tengo, vale????
Paso a daros la receta y espero que os sirva la idea para elaborarlos en estos días.
También aprovecho para desearos a tod@s una felices navidades.
Ingredientes:
1 litro de aceite de oliva virgen extra
1/2 litro de vino blanco común
12 gramos de levadura Royal
120 gramos de azúcar
2 kilos de harina todo uso ( comprada en panadería, la común )
1 puñadito de matalahuga ( por aquí llamamos así al anís )
Ralladura de un limón (sólo la parte amarilla )
Aceite de girasol para freír los roscos
Azúcar para espolvorear los roscos
Preparación:
Calentamos el aceite de oliva y echamos unos trozos de corteza de limón. Cuando la corteza suba arriba, el aceite estará en su punto y le añadimos la matalahuga. Retiramos del fuego y sacamos las cortezas de limón.
Dejamos enfriar, mejor hacer este paso la noche anterior y elaborar los roscos al otro día, el aceite cojera mejor el sabor.
Cernimos la harina junto con la levadura y reservamos.
Cogemos un bol bastante grande, antiguamente para este proceso se utilizaba el "lebrillo de amasar", echamos el aceite ya frío junto con la matalahuga, el vino, el azúcar y la ralladura de limón.
Batimos con ayuda de unas varillas.
Agregamos poco a poco la harina, la que admita, y amasamos con ayuda de las manos, durante unos minutos, hasta obtener la masa deseada. Las manos deben quedar limpias sin adherencias, eso será la señal de que la masa está en su punto.
Ponemos el aceite a calentar.
Cogemos pequeñas porciones de masa y estiramos con ayuda de las manos, debe quedar una especie de lombriz gruesa. Formamos pequeños círculos con ellas.
Es importante que tengamos ayuda a la hora de elaborar los roscos, porque la masa no puede quedar en reposo ya que perdería parte del aceite.
Así que mientras unos van haciendo roscos, otros se encargan de freírlos y pasarlos por el azúcar. Por eso antiguamente se juntaban varias personas a la hora de elaborarlos.
Ponemos en una sartén grande, una buena cantidad de aceite de girasol y vamos friendo los roscos.
El aceite debe guardar siempre la misma temperatura, caliente, si se baja corremos el riesgo de no salir bien la receta.
Cuando veamos que están fritos, se sacan del aceite y se ponen en un escurridor para que suelten el exceso de aceite.
Una vez escurridos se pasan por el azúcar. Este paso hay que hacerlo antes que los roscos se enfríen, de lo contrario no agarrarían el azúcar.
Dejamos enfriar y ya los tenemos listos para comer!!!
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