La verdad es que la calabaza es muy versátil, la podemos emplear tanto en recetas dulces como en saladas, y siempre le da este toque especial. En casa la consumimos muchísimo.
Yo, que soy un poco floja... compro ya la calabaza pelada, y me ahorro tiempo, y sólo tengo que trocear y cocer, que pelar la calabaza tiene su "conque"..., como decimos por aquí.
En el horno subirá mucho, pero en cuanto lo saquéis del horno, comenzará a bajar, hasta quedar como la foto. Que ya se que se me ha dorado más de la cuenta, pero está igual de buena.
Ingredientes:
500 gr de calabaza
4 huevos
1 lata pequeña de leche condensada
1/2 lata de aceite de girasol (100 gr)
1 lata de leche (150 gr)
1 lata de azúcar (150 gr)
1 lata de harina (100 gr)
1 rama de canela
un limón
1 sobre de levadura química (16 gr)
1. - Troceamos la calabaza pelada y la ponemos a hervir en una cazuela con agua, la piel de medio limón y una rama de canela. Unos 15 minutos, hasta que esté tierna.
2. - Quitamos la rama de canela y la cáscara de limón y la escurrimos, dejando enfriar por completo.
3. - Encendemos el horno a 180º y comenzamos poniendo en un bol los 4 huevos y batimos.
4. - Le añadimos el resto de ingredientes, menos la calabaza, y volvemos a batir.
5. - Trituramos la calabaza.
6. - Se lo añadimos a la mezcla anterior y batimos con la batidora de nuevo.
7. - Forramos un molde con papel de horno y volcamos la mezcla y horneamos unos 45 minutos. Esto depende del molde, del horno.... id mirando.
8. - Y dejamos enfriar por completo antes de desmoldarla, aunque yo no le quito el papel de la base.
Decoramos a nuestro gusto.......
Fuente: este post proviene de Recetas y a cocinar se ha dicho!!!, donde puedes consultar el contenido original.
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