Hola !!! ¿Cómo ha ido el día de San Valentín? ¿Habéis preparado algún dulce súper amoroso, algo de chocolate o de frutos rojos quizá? Yo este año, he sorprendido a mi marido y a mis niñas con unos éclairs rellenos de crema de naranja y cubiertos de crema de mascarpone. ¡¡Una delicia!! Los éclairs son unos de los pastelitos favoritos de mi marido. Para salir un poco de lo clásico (nata (crema de leche) y chocolate) los he rellenado de crema de naranja, y nos han encantado. A ver si un día de estos los preparo de nuevo y os traigo la receta.
¡¡Hoy os traigo un pastel que es puro amor dulce!! La semana pasada, Cristina (de Kanela y Limón) publicó en su Blog su bizco - flan de vainilla y fresa con flotatina. Cuando vi aquellas fotos preciosas de su bizco - flan, tan bonito, rosita y brillante, me quedé alucinada, pero me quedé más alucinada todavía después de leer la receta, y ver como se conseguía aquel glaseado brillante y perfecto, que recubría el pastel. ¡¡Si el glaseado no era nada más que gelatina!! Además, la forma de recubrir el pastel con la gelatina me parecía imposible.
Veréis, lo que había que hacer para conseguir aquella maravilla era lo siguiente:
- Hornear y enfriar el bizco - flan. Desmoldar, limpiar el molde y volver a introducir el bizco - flan en el molde.
- Preparar la gelatina con leche y ir echando la misma en el molde, dejando que caiga por los bordes del pastel, hasta que el pastel empiece a flotar en ella, si si, que flote (de ahí la palabra flotatina).
- Finalmente, dejar en la nevera hasta que la gelatina cuaje. Una vez haya cuajado desmoldar y servir.
¡Así de fácil!
Como podéis imaginar, me picó la curiosidad y lo preparé, vamos, lo preparé al día siguiente. Y me quedó perfecto a la primera. Tengo que reconocer que me costó un poco introducir la gelatina, ya que no me quedaba mucho espacio entre el pastel y el molde, casi no había hueco. Me tuve que ayudar de las manos y un cuchillo haciendo pequeños huecos, para poder introducirla poco a poco.
El día siguiente lo hice por segunda vez, con la receta del bizcocho un poco modificada, ya que la adapté a mi gusto y me pasó lo mismo. Esta segunda vez lo que hice fue, introducir un poco de gelatina en el molde y luego introducir el pastel que tenía sobre una fuente (con mucho cuidado), inclinando con una mano la fuente con el pastel y con la otra el molde. Esto es un poco arriesgado la verdad, pero eficaz también. Lo digo por si lo hacéis, tenéis que ser cuidadosos, para que no se os caiga el pastel. Si se rompe un poquito por algún lado no pasa nada, ya que luego la gelatina lo cubre todo :)
La verdad, nos encantó en casa !!
Le llevé un trozo a una amiga para que lo probará y se quedo como yo, alucinada !!
Como veis, yo lo preparé de limón. A parte de optar por este sabor, he modificado (como os he mencionado anteriormente) la receta del bizcocho, ya que a mí personalmente me gustan los bizcochos más jugosos y esponjosos.
Lo podemos preparar y sin la gelatina (me refiero solo el bizco - flan), de esta forma está riquísimo también. A mí me gusta degustarlo a temperatura ambiente, y si lo preparáis os recomiendo que hagáis lo mismo. Dejarlo media hora a temperatura ambiente antes de consumirlo, veréis que cambio de textura.
Con esta receta sale un bizco - flan súper grande. Yo lo he preparado en el molde Bundt clásico, de la marca Nordic Ware. Por supuesto, podéis usar moldes de otras marcas, pero que sean buenos, con un buen recubrimiento antiadherente, porque sino echaríais a perder el pastel, ya que a la hora del desmoldeado se os podría romper.
Si dobláis los ingredientes lo podéis preparar en un molde más pequeño, por ejemplo, los moldes Kugelhopf o Heritage, de la casa Nordic Ware, serían perfectos para estas cantidades.
La verdad, nunca antes había visto un bizco - flan con flotatina, os pasará a muchos, me imagino. Es muy típico en Sudamérica y me parece una monada de pastel !!! Gracias a Cristina por traernos la receta de esta delicia !!
Os animo a que lo preparéis está riquísimo y aunque no lo parece, es muy fácil de hacer !!!
Espero que os guste !!!
Utensilios necesarios:
Tamiz, batidora eléctrica de dos varillas o batidora de pie, báscula de alimentos, jarra mediadora, minipimer, espátula de silicona y molde tipo Bundt de 10 tazas de capacidad o de 2,5 litros.
Receta adaptada de: Kanela y Limón.
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Observaciones:
○ Si se quiere conseguir un sabor a limón total, en vez de vainilla a la masa del flan se le puede añadir ralladura de limón.
○ Para poder desmoldar el bizco - flan con facilidad después del horneado, es muy importante engrasar muy bien el molde con mantequilla. También, no hay que olvidarse de engrasar el molde con aceite, antes de echar la gelatina, ya que esto facilita el desmoldado final del pastel.
○ Para que el resultado final quede perfecto, es muy importante que el bizco - flan flote en la gelatina.
○ Se puede preparar perfectamente solo el bizco - flan, sin la gelatina. Queda delicioso y además precioso. En este caso se puede servir con un poco de nata montada (crema de leche), frutos rojos, salsa de chocolate blanco o de limón, e incluso con salsa de caramelo si nos apetece.
○ Aunque en esta receta la gelatina se disuelve en leche, también se puede preparar con agua. Quedará un bizco - flan como si estuviera cubierto por un cristal, es un efecto también muy bonito.
○ Este pastel se conserva muy bien durante 3 - 4 días en la nevera.
Espero que os animéis a prepararlo y me contéis vuestra experiencia !!!
Hasta la próxima !!!
Besos!