Este curioso dulce se prepara, según las zonas, con pequeñas variaciones, pero todas tienen algo en común, están deliciosas.
Su preparación es muy sencilla, solo tendrás que practicar un poquito hasta coger el tranquillo.
Si dispones del molde o tienes la posibilidad de conseguirlo, no dejes de probarlas y ya me contaras.
INGREDIENTES:
-300 gr. de harina.
-2 huevos.
-400 ml. de leche.
-3 cucharadas de ron.
-3 cucharadas de agua de azahar.
-1 cucharadita de levadura en polvo.
-1 pizca de sal.
-Aceite de girasol para freír.
-Azúcar y canela para espolvorear.
-1 piel de naranja.
PREPARACIÓN:
Batir en un bol los huevos con el ron y el agua de azahar. Añadir la harina tamizada con la levadura y la sal. Mezclar sin mover demasiado con una cuchara de madera e ir añadiendo la leche poco a poco.
Dejar reposar tapada y en un lugar templado 2 ó 3 horas.
Poner a calentar el aceite en una sarten honda o cazuela. Meter el molde de las flores dentro del aceite con la cascara de naranja. Cuando el aceite este caliente, sacar la cascara de naranja que ya estará tostada, sacudir un poco el exceso de aceite del molde y sumergirlo en la masa hasta 3/4 aproximadamente, es muy importante que la masa no llegue arriba del todo del molde pues la flor no se desprendería sumergirlo en el aceite y cuando la masa comienza a endurecer, antes de dorarse, mover el molde arriba y abajo varias veces hasta que la flor se suelte, puedes ayudarte de un tenedor si fuera necesario.
Dejar el molde dentro de la sarten para asegurarte que no se te olvida calentarlo para cada vez.
Dorar por las dos caras y sacar sobre papel absorbente de cocina para que escurra el exceso de aceite.
Repetir hasta acabar con toda la masa.
Rebozar en azúcar con canela.