Esta tarta es la que hice para el cumpleaños de mi hermana Gara.
La cobertura es toda de fondant hecha con nubes (marshmellows) y teñida con colorantes aptos para comer de wilton.
Ingredientes (da para cubrir dos tartas como esta)
280 gramos de nubes blancas o marshmellows (es lo que pesa un paquete comprado de nubes blancas. Lo podeis encontrar en carrefour, en la parte de comida internacional)
560 gramos de azúcar glass (no vale que lo hagais, tiene que ser azúcar impalpable. En carrefour en la parte de comida internacional teneis paquetes a 1.50 el medio kilo, sale mejor de precio que en Mercadona)
4 cucharadas de agua
Colorantes para teñir
Mantequilla o margarina
Aroma o esencia que os guste (yo le puse coco, una cucharada)
Preparación:
En un bol apto para microondas pondremos un poco de mantequilla por toda la base y las paredes para que no se pegue el fondant.
Ponemos las nubes en el bol y echamos las cucharadas de agua repartidas por todos lados y llevamos al microondas a máxima potencia unos segundos hasta que veamos que se han derretido (suben como la leche cuando hierve asi que tened cuidado. Tampoco las dejeis mucho tiempo porque se queman y toman mal sabor y color)
Sacamos del microondas, añadimos el aroma y echamos el contenido en otro bol donde tendremos el azúcar glass, hacemos un hoyo en el centro y vamos echandolo con ayuda de una pala de madera que habremos pintado con mantequilla para que tampoco se pegue.
Tened cuidado y no metais la mano en este momento porque las nubes estarán hirviendo, y no es más que caramelo caliente que quema, asi que usad la espátula hasta que tengais una bola y no queme.
Amasar hasta obtener una bola que no se pegue a las manos (pintaros las manos con mantequilla también)
Envolver en papel film transparente y dejar en la nevera hasta la hora de usar.
Para forrar una tarta primero hay que cubrirla con alguna crema para que se adhiera el fondant. Yo usé una ganaché de chocolate pero podeis usar la crema que querais, siempre y cuando sea lisa y no tenga trocitos de nada.
Estirais el fondant que no quede muy grueso pero tampoco muy fino para que no se rompa y lo poneis sobre la tarta. Luego es cuestión de decorar al gusto!!
Nota: Yo no usé todo el azúcar glass en ese momento, me quedaron como 100 gramos sin añadir que fui usando más tarde para estirar en la mesa.
Una vez que dejais el fondant en la nevera se pone muy duro y para poder trabajarlo teneis que quitarle el papel y darle un golpe de microondas, lo justo para dejarlo manejable.
Para teñirlo es mejor que vayais por partes, cortad la porción que necesiteis y teñidla y asi lo que os sobre seguirá blanco y lo podreis reutilizar para otras cosas.