Desde que vi esta receta en el blog de María Lunarillos, me dije "tengo que hacerla". Parece complicada de hacer, pero cuando te pones a hacerla ves que solo es entretenida. No hay que ser muy mañoso, pero si tener un poquito de paciencia para elaborar el enrejado.
Para rellenarla, le puse mi mermelada de fresa casera, pero podeis usar de la comprada.
Para mi gusto es un dulce, poco "dulce", la masa quebrada no tiene dulzor y la mermelada es muy poca cantidad, así que en otra ocasión, quizá le espolvoree azúcar blanquilla a la masa del enrejado antes de poner la mermelada. Pero bueno, eso va en gusto, está muy buena de todas maneras.
INGREDIENTES.
1 Lámina de masa quebrada.
Mermelada de fresa.
Mantequilla fundida.
Azúcar glass.
PREPARACIÓN:
Cortamos la masa quebrada en tiras de un centímetro más o menos.
Ponemos 5 o 6 tiras verticalmente sobre un papel de horno y vamos entrelazando tiras horizontalmente, de manera que una tira vaya por encima y otra por debajo.
Terminamos todas las tiras y tendremos formado nuestro enrejado.
Cortamos con un cortapasta círculos del enrejado.
De la parte de la masa quebrada lisa cortamos círculos. Ponemos una cucharadita de mermelada de fresa.
Colocamos el círculo enrejado encima y pintamos con mantequilla fundida.
Espolvoreamos azúcar glass y horneamos 10 minutos a 200º. Hasta que las veamos doradas.
Dejamos enfriar sobre una rejilla.
La lámina de masa quebrada, no he conseguido encontrarla cuadrada, para aprovecharla mejor. De todas maneras esta, del mercadona, nos vale.
Cortáis tiras de un centímetro mas o menos. Yo usé una regla para que me salieran derechitas. Debéis cortar unas diez tiras, si necesitamos más se cortan después. Así dejamos una parte de la masa sin cortar para luego hacer las bases lisas de la galleta.
Ahora viene el enrejado. A ver si me explico bien. Ponéis cinco o seis tiras en forma vertical sobre un papel de horno. Cogéis una tira y la entrelazamos de forma horizontal.
Cogemos una segunda tira. Vamos entremetiéndola, una arriba, una abajo.
¿Veis? Vamos levantando las tiras una a una para formar el enrejado.
Lo hacemos hasta llegar abajo y ya tenemos el enrejado listo. Los filos que sobran a los lados, se cortan pero no se tiran porque los podemos unir y estirar con el rodillo, nos puede servir para otra cosa. Yo los aproveché para hacer unas pequeñas tartaletas.
Ahora con un cortapasta redondo o un vaso pequeño, cortamos círculos del enrejado.
Aquí están.
Y con el resto de la masa que no hemos usado, cortamos círculos lisos. De una lámina de masa nos salen cinco o seis galletas, depende del tamaño que le demos. Si queremos más galletas, cogemos otra lámina.
En el círculo que actúa de base ponemos una cucharadita de mermelada de fresa. No la llenéis mucho que luego se sale.
Y le colocamos la parte enrejada encima.
Las pintamos con un poquito de mantequilla fundida en el micro.
Y le espolvoreamos azúcar glass por encima. Las horneamos unos diez minutos, o hasta que se doren. Espero haberme explicado bien. Son fáciles de verdad.
Un primer plano. Guapa, ¿verdad?
El corte, es una galleta crujiente, la única pega para mí, es lo poco dulce, pero yo es que soy muy golosa.
Para una merienda con invitados es fantástica, porque vais a quedar muy bien.
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Fuente: este post proviene de Tapitas y postres, donde puedes consultar el contenido original.
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