Esta segunda edición pretende crear un encuentro cultural y gastronómico entre sus expositores y visitantes. Para ello, utilizará como reclamo los dos pilares más representativos de la ciudad; la cultura del Quijote y los alimentos manchegos. Durante estos días, se podrá disfrutar de los alimentos más típicos, así como de todas sus Denominaciones de Origen. Esta vez, su artesanía ocupará un lugar muy destacado en la feria que contará con stands en los que se exhibirán todos los productos.
Sin tiempo para el aburrimiento
Habrá actividades desde las 11 de la mañana hasta las 10 de la noche; han sido organizadas de manera que puedas disfrutarlas tanto dentro como fuera del recinto ferial que ha sido habilitado para la ocasión. El catavinos será el eje conductor de toda la feria y, a través de él, se accederá al resto de propuestas. La presentación gastronómica corre de cuenta del Centro de Iniciativas Turísticas, que ha preparado degustaciones y platos típicos de la 'cocina del Quijote'.En esta excursión culinaria también participan hoteles y restaurantes, que ofrecerán los menús de la feria; todos ellos elaborados con productos de la tierra. Además, se contará con la colaboración de cocineros de reconocido prestigio que aportarán su granito de arena mediante charlas sobre alimentación sana, clases de cocina y demostraciones que acabarán por servirse en bandeja una vez elaborados los platos.
Finalmente, los visitantes podrán aprender a reconocer el mejor maridaje entre los alimentos y vinos de Castilla-La Mancha en unas sesiones dedicadas a esta interesante vertiente culinaria.
Pero a pesar de que la gastronomía ocupa un papel fundamental estos días, las artes escénicas también cuentan con un hueco en esta feria. Representaciones teatrales y música animarán al público a lo largo de todas las jornadas y vendrán acompañadas de exposiciones, concursos populares, espectáculos nocturnos y talleres infantiles.