Hoy os traigo una receta muy sencilla, que se prepara con pocos ingredientes y queda muy buena, leche condensada casera.
La leche condensada se utiliza para preparar infinidad de recetas dulces, también es excelente para acompañar el pan, galletas, un café...
Esta leche condensada además de sencilla está muy buena, se conserva mucho tiempo en la nevera, así que la puedes hacer y tener siempre para cuando te haga falta preparar algún postre, también se puede congelar.
En esta ocasión te enseño como preparo la leche condensada normal con azúcar, pero tu puedes hacer tus variantes, puedes hacerla sin azúcar o con edulcorante, también he puesto aroma de vainilla, puedes prescindir de ella si no te gusta.
Puedes utilizar la leche normal entera, aunque yo siempre utilizo la leche en polvo.
Ingredientes:
200 gr. de leche en polvo
200 gr. azúcar
200 ml. de agua
1 cucharada de vainilla
50 gr. de mantequilla
Preparación:
Para hacer la leche condensada casera, lo primero pon un cazo con el agua, la vainilla y la mantequilla a fuego medio.
Añade el azúcar al cazo, ves removiendo hasta que se disuelva todo.
Incorpora la leche poco a poco removiendo, así hasta añadir toda. No pares de remover. Una vez toda la leche incorporada, si te quedan grumos, pasa la batidora, así te quedará una crema más lisa.
Deja se cocine a fuego medio unos 30-40 minutos mas o menos, con cuidado no se queme la leche condensada casera. Ha de quedar una leche cremosa. Si te queda muy espesa puedes añadir un poco de agua o leche. Prueba de azúcar, si te gusta más dulce antes de que esté lista puedes añadir un poco más.
Una vez tengas la leche condensada casera lista, pásala a un tarro, deja se enfríe y ponla en la nevera. Deja repose un día así estará más buena y ya estará lista para comer!!!
Montse