La primavera nos está dando unos días cálidos y unos aromas únicos al caer la tarde con la floración de estos días. Hace más calor del habitual en estas fechas y nos viene genial elaborar postres sin horno. En lugar de hacer una base de masa horneada, me decidí por una de galletas. Más sencilla y ligera e ideal para estas fechas en las que ya comienza a calentar algo el ambiente.
Esta base de galletas la rellenamos de un suave lemon curd o crema de limón y acompañamos de una buena cobertura de merengue italiano. Es un postre que se conserva en la nevera y nos alegrará más de una comida o cena.
¿Podemos pedir más a estas tardes de primavera? Abril está a la vuelta de la esquina, llega la Semana Santa y la Pascua y no se me ocurre mejor manera de inaugurar la antesala de estas festividades que un delicioso lemon pie.
¿Sabes cuál fue su origen?
Se tiene constancia de la crema de limón en la Inglaterra del s. XVIII a mano de los protestantes que llevaron esta receta a América unos años después. Estaba compuesta de yemas de huevo, azúcar, ralladura y zumo de limón.
Este tipo de pastel carecía de merengue porque los colonos no tenían tantos recursos e ingredientes como los huevos o el azúcar eran bastantes caros en aquella época. No sería hasta 1806 cuando se conocería la primera Lemon Pie a base de hojaldre y rellena de crema de limón elaborada por Elizabeth Goodwell, cocinera estadounidense propietaria de una pastelería en Philadelphia y además impartía clases de cocina en las que uno de sus postres característicos fue esta tarta rellena de crema de limón.
Cuentan las historias que un día usó muchas yemas para otros postres que estaba cocinando y decidió hacer una cobertura de merengue para su famosa tarta, dando origen a lo que hoy conocemos como Lemon pie. Esta tarta tuvo gran éxito a nivel local y luego se popularizó en Estados Unidos, gracias a la incorporación de esta receta en el libro de cocina de Eliza Leslie, una antigua alumna de Goodwell.
Hoy es día es un postre muy popular que se elabora en muchos países y que está delicioso. ¿Quién no la conoce o la ha probado alguna vez?
¡Pasamos a la receta! ¡Toma papel y lápiz que comenzamos!
Ingredientes: Para un molde de 16 cm.Para la base:- 1 paquete de galletas maría trituradas
- 80 grs. mantequilla derretida
Para la crema de limón:
- 150 gr. azúcar
- 3 yemas
- 80 ml. zumo de limón
- 55 grs de mantequilla fría a cuadraditos.
- 1 sobre de agar agar
Para el merengue italiano
- 3 claras
- 150 grs. azúcar
- una pizca de sal
- chorrito zumo de limón
Preparación:
En primer lugar comenzamos por la base de galletas. Las trituramos en un procesador de alimentos o con rodillo y un paño que las cubra en una tabla. A continuación, agregamos la mantequilla derretida y mezclamos bien. Cubrimos la base de nuestro molde con papel vegetal y engrasamos los bordes.
Cubrimos con la base de galletas haciendo un borde para el relleno de crema. Nos ayudamos con una cuchara. Una vez esté bien distribuido lo llevamos a la nevera.
Para la crema de limón o lemon curd comenzamos exprimiendo el limón. Colamos y reservamos un poco para disolver el sobre de agar agar.
A continuación calentamos en un cazo a fuego medio-lento el azúcar, el zumo y las yemas. Antes que hierva añadimos la mezcla de agar agar y esperamos que se caliente un par de minutos. No dejamos que hierva. Retiramos y añadimos la mantequilla en dados. Removemos hasta que comience a espesar. Dejamos templar y luego añadimos a nuestra base de galletas. Dejamos reposar en la nevera.
En mi caso lo dejé toda la noche y así añadirle el merengue a la mañana siguiente. Si no, podéis dejarlo unas horas en la nevera hasta que cuje bien la crema.
No le añadí ralladura de limón a la crema porque los limones que tenemos en casa son muy intensos y con el zumo era suficiente. Si os gusta un sabor más intenso, podéis añadir ralladura de medio limón a la crema.
Para el merengue italiano calentamos los ingredientes en un cazo a fuego lento hasta que se disuelva el azúcar. Hay que tener paciencia e ir removiendo para que se disuelva bien. Una vez esté bien disuelto retiramos.
Llevamos a nuestro robot y montamos hasta que las claras bajen de temperatura y se monten formando un merengue espectacular. Queda bien firme y brillante.
Para esta decoración, utilicé las servilletas classic rose de Renova
Decoramos nuestra tarta haciendo montoncitos y picos con una cuchara o bien con una manga pastelera. Como más os guste. Imagino lo que sucederá con el cuenco del merengue sobrante...
Le damos toque dorado con soplete. La llevamos a la nevera y conservamos en porta-tartas o recipiente hermético un máximo de 3 días. Es ideal para una celebración o comida especial.
Espero que os haya gustado la receta. Es ideal como postre o parte de un brunch dulce como el que preparé como partner para el reto "Mujeres Desesperadas" de Food Fiction Division en Instagram. Fue un bonito homenaje de despedida al estilo Wisteria Lane a una serie que ha tenido tanto significado para mí y que tan buenos ratos me hizo pasar pegada a la pantalla.
Continuamos disfrutando de esta maravillosa primavera y volvemos pronto con alguna propuesta para Pascua
Os mando un abrazo.
Maribel García