Aunque en Palermo se suelen utilizar los “anelletti”, una pasta con forma de anillo, en España puede ser difícil de encontrar y los macarrones ofrecen un resultado también bueno, a la vez que tradicional, es por eso que en esta receta vamos a ver cómo preparar unos deliciosos macarrones al horno, con un ragú, queso mozzarella y parmesano gratinado por encima.
Detalles de los macarrones al horno
En los hogares italianos existe la tradición de preparar los macarrones al horno cada domingo para comer en familia, dependiendo de la zona, los encontraremos con unos ingredientes u otros, con una u otra pasta, pero siempre con la misma esencia.
En esta receta os quiero enseñar la que hemos comido en mi casa toda la vida, desde que los preparaba mi abuela, después mi madre y ahora yo. Os voy a explicar también algunos cambios que podemos encontrar en las diferentes zonas de Italia para preparar una pasta al horno a vuestro gusto.
Variantes de la receta
Dependiendo de la zona, podemos encontrar que la salsa de los macarrones al horno se prepara con un ragù de ternera o con una simple salsa de tomate. (Una salsa de tomate sencilla con el sofrito de zanahoria, cebolla y apio).
En la receta palermitana se le añaden guisantes y berenjena al guisado de carne, es una opción que me gusta mucho también, aunque resulta más pesada.
En otras variantes más “comerciales” que podemos encontrar en los restaurantes, se le añade un poco de bechamel y champiñones, quitando el ragú y dejándolos más suaves.
Presentación y conservación
A la hora de preparar los macarrones al horno, es importante el orden en el que pongamos las capas en la fuente antes de meterlo en el horno. Aquí os dejo un pequeño orden para que sea más sencillo:
Macarrones
Salsa
Mozzarella
Capa fina de macarrones
Capa fina de mozzarella
Capa fina de salsa
Parmigiano rallado para gratinar
Podemos preparar los macarrones al horno un día antes de comerlos, dejarlos en la nevera y gratinarlos en el momento de comerlos. Se pueden incluso congelar para conservarlos durante un par de meses sin problemas, después, bastará con meterlos en la nevera un día antes de comerlos y gratinarlos normalmente.
Buon appetito!
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