RECETA DE MAGDALENAS CON COPETE
Si seguís mis consejos, conseguiréis unas magdalenas caseras con una miga espectacular y muy ricas. Además de cocinar unas magdalenas caseras con un buen copete, alto y firme, que hará las delicias de toda la familia. Ni os cuento cómo les gustan a los peques de la casa.
Estas magdalenas están deliciosas, para comerlas solas o mojando en un buen tazón de leche. ¡Cosa rica! Si queréis aprender a hacerlas, no os perdáis cómo las elaboro. Por si sois golosos, os dejo también estas magdalenas de café y las magdalenas de pera y canela. Y ahora sí, amigos, ¡al lío!
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Ingredientes
Para 10 magdalenas2 huevos medianos.
175 g de azúcar.
190 ml de aceite suave.
60 ml de leche.
1 cuharada de vainilla.
210 g de harina de trigo todo uso.
8 g de levadura.
1 pizca de sal.
RECETA DE MAGDALENAS CON COPETE PASO A PASO
CÓMO HACER LA RECETA DE MAGDALENAS CON COPETE
Para hacer nuestras magdalenas con copete, lo primero que vamos a hacer es echar los huevos en un recipiente mediano.
Batimos los huevos durante unos 2 o 3 minutos con la ayuda de una varilla eléctrica.
Cuando los huevos hayan doblado su tamaño, iremos incorporando el azúcar poco a poco.
Blanqueamos los huevos unos 3 minutos, aproximadamente.
Después, los aromatizamos con un poco de vainilla para darle sabor a nuestras magdalenas caseras.
Si no os gusta la vainilla, podéis cambiarla por canela o ralladura de limón, por ejemplo.
Batimos nuevamente unos 10 segundos.
Agregamos los líquidos poco a poco.
Primero el aceite suave y seguimos batiendo, no paramos.
Yo he usado uno suave, pero vosotros podéis emplear uno de oliva.
Eso sí, el aceite de oliva aportará un sabor más fuerte a nuestras magdalenas.
Luego, vertemos la leche, también poco a poco, y continuamos batiendo, sin parar en ningún momento.
Es importante que tengamos todos los ingredientes a temperatura ambiente, nunca fríos, para la receta de magdalenas.
Una vez integrados todos los líquidos, reservamos la mezcla.
En cuenco colocamos la harina y la levadura y las mezclamos muy bien.
Acto seguido, introducimos los ingredientes secos (la harina y la levadura) en el recipiente en el que se encuentran los huevos y los líquidos.
Removemos durante 1 minuto, aproximadamente, a velocidad media.
Cuando tengamos todo medianamente integrado, ponemos la pizca de sal.
Batimos nuevamente hasta que se integre todo perfectamente.
Recordad que cambiando la vainilla por otros ingredientes podréis tener magdalenas de naranja, unas ricas magdalenas caseras de limón o, para los más golosos, una estupenda receta de magdalenas de chocolate (añadiendo pepitas de chocolate o cacao en polvo)
MASA DE MAGDALENAS CASERAS Y HORNEADO
Tapamos y lo dejamos reposar en la nevera como mínimo 2 horas o de un día para otro (muchísimo mejor).
En el momento de tapar la masa, para que no se forme una costra, colocamos el papel film de tal forma que toque nuestra masa (lo que se denomina a costra).
Después de toda la noche la nevera podremos observar cómo se han formado pompitas, burbujitas.
Esto será aire en nuestra receta de magdalenas fáciles. Y con una cuchara, tras retirar el papel que las cubría, vamos a quitar un poquito ese aire de la masa.
Observaréis que la masa está llena de agujeritos por dentro. Esto es muy importante.
Con la ayuda de dos cucharas, iremos rellenando nuestro molde.
Ojo, la masa debe cubrir solo las tres cuartas partes o un poquito más del molde, nunca debe rellenarlo del todo.
Mientras, pondremos nuestro horno a 180º con calor arriba y abajo.
Una vez lleno nuestro molde, lo introducimos en la bandeja del medio de nuestro horno.
Cocinamos a 180º, calor arriba y abajo, durante 18 o 20 minutos.
En ese tiempo, nuestras magdalenas al horno habrán aumentado su tamaño y tendrán un copete del bueno.
El tiempo de horneado es orientativo. Cuanto más pequeño sea el molde, menos tardaremos. A mayor tamaño, más tiempo de horneado.
Sacamos nuestras magdalenas del horno y las dejamos enfriar unos minutos.
Ya solo nos quedaría quitarle el papel a nuestra magdalena y disfrutar de ella comiéndonosla.
¡Madre mía, que cosa más rica: esponjosa y deliciosa!
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