Las magdalenas de naranja veganas son una opción ideal para disfrutar de cualquier desayuno o merienda, además no requieren de muchos ingredientes e incluso os pueden ayudar los peques de la casa, seguro que les encanta pringarse y a vosotros recoger luego el desastre jeje.
Estas magdalenas de naranja las hice para aprovechar unas cuantas naranjas que tenía, y aunque nunca me sobran ya que me encanta desayunar zumo de naranja recién exprimido,me apetecía aprovechar algunas para hacer estas deliciosas magdalenas veganas.
Son una buena opción para los que no os gustan los postres demasiado dulces ya que la cantidad de azúcar que llevan no es muy alta y además el toque que le da el zumo de naranja contra resta muy bien; yo nunca he sido una gran fan de los postres que llevan naranja pero me quise arriesgar con estas magdalenas y la verdad es que nos han gustado mucho.
La pequeña anécdota de estas magdalenas de naranja es, que Jesús se comió las que hice la primera vez antes de poder grabar el resultado jaja menos mal que me sobraba masa y pude enseñároslo en el vídeo y en las fotos, aún así preparé más masa ya que sólo me sobró para dos magdalenas más jaja mirad que le tengo dicho que me avise antes de coger algo por si aún no he terminado de preparar el vídeo y el post.
Lo bueno es que así tuvimos más magdalenas después
Con las cantidades que os dejo a continuación os van a salir unas 6 magdalenas, os pueden salir más pero prefería que quedasen más altas ya que así están más vistosas.
Ingredientes :
2 tazas de harina integral
2/3 de taza de azúcar de caña/coco…
Pizca de sal
3 cdtas de levadura química
1/2 taza de aceite de oliva suave o de girasol
1 taza de zumo de naranja (recién exprimido mejor pero os vale de botella)
Preparación :
Primero en un cuenco amplio echamos la harina tamizada junto con la sal y la levadura química.
Le ponemos el azúcar y removemos todo con ayuda de unas varillas.
A continuación mezclamos el aceite con el zumo de naranja y los echamos a la mezcla de ingredientes secos.
Mezclamos todo bien y con ayuda de una cuchara o como en mi caso, con la cuchara de helados echamos la mezcla en las cápsulas de magdalenas que tendremos puestas ya en un molde.
La mezcla debe quedar hasta casi casi arriba para que crezcan bastante.
Las metemos al horno precalentado a 180ºC durante 25 o 30 minutos, hasta que las veamos dorados y al pinchar con un palillo éste salga limpio.
Las dejamos enfriar sobre una rejilla.
Podéis comerlas ya como hizo Jesús jaja pero las que desayunamos al día siguiente estaban aún más ricas, eso si aguantáis, claro
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