Muerte en un país extraño (Receta para una historia nº67)

Como siempre, y para no perder la costumbre, nos despedimos del mes más corto del año con una nueva receta para una historia.

Este mes ha sido muy intenso, la verdad que hace tiempo que no tenemos un mes tranquilo. Y creo que más adelante será aun peor, porque cuando nazca la Petit Accident sí que no pararemos.

Para despedir febrero y darle la bienvenida a marzo he elegido un libro que le regalé a Monsieur Accidents en el 2002 cuando venía una época de muchos cambios. En el que escribí la dedicatoria siguiente:

"Te deseo que todo te salga bien porque te mereces lo

mejor. Este año que viene nuestra vida será diferente

y verás lo feliz que estarás. Otro trabajo, una

casita, etc. Todo, todo lo bueno de esta vida te

lo mereces y yo estaré siempre a tu lado. Un

beso muy grande y con mucho amor de tu

Lolilla."

Y es que estamos en un momento de cambios, no como aquel año, el cambio que viene es una nueva vida que hará que la nuestra de un cambio brutal, pero lo deseamos con mucha ilusión.

Además, este libro me recuerda que hace mucho que no viajamos a otros países, o recorremos el nuestro, ni siquiera hemos podido visitar a la familia... la pandemia está complicando nuestros momentos sociales así como los de ocio, que están siendo nulos.

Pero lo que sí no hemos dejado de hacer es leer, ahora más que nunca, ya que, como no podemos salir ni viajar, ni reunirnos..., ese tiempo lo dedicamos, entre otras cosas, a la lectura.

Una de nuestras escritoras favoritas es Donna Leon, una de las más interesantes "damas del crimen", a la que nos pareció ver en Venecia cuando la visitamos. ¡¿Quién sabe?! Luego más tarde la hemos conocido en la Feria del Libro de Madrid y hemos asistido a alguna conferencia donde hemos podido hablar con ella. Es una mujer multifacética, encantadora, interesante y muy especial.


"Muerte en un país extraño", su segunda novela, fue muy favorablemente acogida en el extranjero por el público y la crítica, traducida a veintitrés idiomas, fue la que dio forma a la serie policiaca que se desarrolla en Venecia.

Os recuerdo que ya he compartido con vosotros otros libros de esta saga como Muerte en La Fenice, Vestido para la muerte, Un mar de problemas, Malas artes, La chica de sus sueños y Amigos en las altas esferas.

Nos gustan sus novelas porque nos llevan de vuelta a Venecia, una ciudad que nos encanta y a la que queremos volver. Nos gusta el trasfondo de vida cotidiana que nos muestra Guido Brunetti y su familia, su esposa Paola y sus hijos Raffi y Chiara, que ya forman parte de la nuestra desde hace muchos años.

Y ahora, os dejo con los ingredientes para preparar un delicioso plato italiano lleno de sabor, intriga y misterio:

1 canal veneciano

1 cadáver de un ciudadano militar americano (Opcional: Michael Foster)

1 comisario (Opcional: Guido Brunetti)

1 taza de presiones superiores

1 taza de razones políticas

1 escándalo de residuos tóxicos

1 trama controlada

1 gobierno italiano

1 ejército americano

1 mafia




Colocamos el cadáver de un ciudadano americano en un canal veneciano que ponemos al fuego y dejamos cocer hasta que esté tierno, removiendo de vez en cuando.

Batimos y añadimos un comisario (Guido Brunetti) y una taza de presiones superiores debidas a razones políticas y mezclamos todo bien.

Añadimos un escándalo de residuos tóxicos y removemos bien para que se integren en la salsa. Apartamos del fuego y servimos.

Para terminar, rociamos con una trama controlada por gobierno italiano, el ejército americano y la mafia.

Degustar este delicioso plato de espaguetis con salsa de brócoli en buena compañía y una copa de vino.

Como siempre, os invito a que penséis y escribáis un relato con estos ingredientes y lo compartáis con nosotros. Puedes seguir mi receta o hacer la tuya propia. Es una forma de dejar libre nuestra imaginación y desarrollar nuestra creatividad.

Bon appétit! Joyeux mars!