Desde nuestros comienzos en el mundo de la cocina, uno de los platos de repostería que mas nos gustaban y que mas hemos preparado, solo los ya conocidos muffins. De siempre me han parecido unas tentaciones irresistibles, y con tantas posibilidades y variedad, que nunca deja de haber recetas para probar e innovar.
Las primeras que preparamos, fueron las ya conocidas por todos los delantaleros, Muffin de fresas y crema de queso y las Muffin de choco-blanco y choco-negro. Dos variedades que nos siguen pareciendo deliciosas, pero que no son las únicas que hemos probado ni preparado. La que hoy compartimos con vosotros, es una de las variedades que mas ganas tenia de presentaros, y una de las preferidas de Carmen, debido a su afición a este tipo de cacao en polvo, al igual seguro que muchos de vosotros.
Su preparación no varia de las ya publicadas, con el añadido de ciertos ingredientes que hacen de esta variedad diferente al resto, aunque, como en todo, siempre existen unos ingredientes base que son imprescindibles. Si ya tenéis experiencia en la preparación de muffin o en la repostería en general, no os resultaran nada complicados. Y para aquellos que empezáis en este mundillo, os diría que esta es una de las variedades perfectas para comenzar, ya que es de las mas simples y sin coberturas ni preparaciones mas profesionales ni complejas. Nadie tiene excusa para no hacerlas!. Vamos dando paso a la receta, así que, como siempre, los delantales puestos y manos a la obra!
Ingredientes (11 unidades):
115 gr de harina de repostería
25 gr de Nesquick o cacao en polvo
75 gr de azúcar
1/2 sobre de levadura
1 yogur griego azucarado
62 ml de aceite de girasol
1 huevo
2 cucharadas de leche
Preparación:
Batimos el huevo junto con el azúcar hasta que quede una mezcla espumosa y clara.
Añadimos la leche, el yogur y el aceite de girasol y continuamos batiendo hasta que se encuentre todo integrado.
Vertemos en la mezcla el cacao y la harina tamizada junto con la levadura poco a poco. Continuamos batiendo hasta formar una masa sin grumos.
Precalentamos el horno con calor arriba y abajo a 180º. Dejaremos el calor solo abajo al meter las muffin al horno.
Vertemos la mezcla en los moldes (podemos untarlos con mantequilla, pero si son moldes de silicona, no será necesario). Tener en cuenta que no hay que llenarlos hasta arriba, ya que al hornearse, subirán y se saldrían.
Los tendremos unos 20 minutos aproximadamente, comprobando con un palillo que están listos.
Los sacamos y dejamos enfriar antes de sacarlos del molde.
Unos muffin con un ligero toque que nos recordará al famoso cacao en polvo. Esponjosos y dulces... Solo de pensar en ellos nos están entrando unas ganas horribles de comerlos... ¿a vosotros no?
Un saludo a tod@s y buen provecho!