La receta que propongo son unas rodajitas de naranjas confitadas y cubiertas de chocolate. Ummmmm deliciosas y muy facilitas, ideales para acompañar el cafecito de media tarde, un té o una infusión.
Os podéis animar a hacerlas y sorprenderéis a vuestros invitados en las fiestas que se aproximan, jijiiii
Los ingredientes:
Si, así de poquitos, fáciles y simples
Primero de todo, elegir naranjas que tengan la piel fina. Lavar bien la naranja y partirla en rodajas lo más fina posible. Depositar en la base de una cacerola sin que se pongan una encima de otra. Cubrir con un dedito de agua. Poner a cocer. Cuando rompa el hervor, dejar cinco minutos.
Pasado este tiempo, retirar el agua con cuidado. Disponer otra vez las rodajitas de naranja y volver a cubrir con otro dedito de agua. Esperar que vuelva a romper a hervir y contaremos otros cinco minutos.
Repetiremos por 3ª vez el mismo proceso.
Ahora las pondremos a escurrir un poco. Las volveremos a poner en la cacerola, pero esta vez las cubriremos de azúcar. Dejaremos que se caramelicen con el azúcar, pero sin que se llegue a quemar el azúcar. Cuando veamos que están brillantes, con cuidado las iremos sacando del azúcar y las dejaremos enfiar encima de una rejilla.
Una vez frías, desharemos chocolate de cobertura y las bañaremos por la mitad o enteras, eso a vuestro gusto y las volveremos a dejar sobre la rejilla para que se enfríe el chocolate. Y listo.
Bon profit !!!