Además, por si fuera poco, mi chico y yo hemos decidido adoptar a un compañero para nuestra perrita y os podéis imaginar el trabajo que se me viene encima, entre mudanza, mini obras y nuevos miembros en la familia... Total, que no voy a poder estar por el blog durante un tiempo. ¡No puedo hacer cocinitas con la casa patas pa" arriba! Será un mes de trajín y apañar comidas y cenas con lo que podamos.
En el fondo me va bien hacer este parón porque, con sinceridad, mi nivel culinario es nulo y aunque voy haciendo mis avances, a veces me siento un poco ridícula... jeje! En un inicio la intención era hacer simplemente un recetario, un lugar donde guardar las recetas de los platillos que iba haciendo y poder encontrarlas con facilidad en un futuro. Luego me fui animando e integrándome cada vez más...
En esté maravilloso mundo cibernético me topé con personas estupendas que me habéis ido animando y apoyando desde el principio. ¡Os lo agradezco muchísimo, de corazón! Para mi sois un referente y aunque no tenga tiempo para mi blog, seguiré leyendo los vuestros y aprendiendo con cada entrada que publiquéis. Para mi sois mis maestros y mi inspiración (y no es peloteo, ¡que conste!)
Cuando me sienta más desahogada volveré a la carga y dispuesta a cocinar todas esas recetas que tengo guardadas y estoy deseando probar desde hace tiempo. Así que os digo un adiós emporal, pero os advierto que pronto volveréis a saber de mí!
Muchos besitos, abracitos y de todo!!!!