Otra receta con calabacín para repetir. Quedó deliciosa y hasta los más reacios a las verduras pueden disfrutar comiendo este pastel. Recomiendo un buen tomate frito, casero o comprado. Este de Hida es el que más me gusta de todos los comerciales y viene genial para multitud de recetas. La bechamel no es tan buena como la hecha en casa, pero igualmente es un comodín para cuando queremos que sea una receta rápida. Lo que hago es ponerle algo más de nuez moscada, que no se suele notar en estas industriales.
-3 calabacines
-medio fiambre de pechuga de pavo braseada Campofrío
-un bote de tomate frito casero
-medio brick de bechamel
-hierbas provenzales
-lonchas de gouda tierno o queso que funda bien
Cortamos los calabacines en rodajas no muy gruesas y cubrimos la base.
Sobre estos ponemos la mitad del tomate y la mitad del pavo picado en cuadrados.
Volvemos a cubrir con calabacines.
Y de nuevo con tomate y pavo.
Cubrimos con el resto de calabacín y espolvoreamos con las hierbas.
Napamos con la bechamel y pizca de nuez moscada.
Coronamos con las lonchas de queso.
Metemos en el horno a temperatura media durante 30 minutos. Gratinamos 5 ó 10 minutos.
Bon profit!