Como cada sabado cuando nos reunimos en casa de mi madre a comer, yo soy la encargada de llevar el postre.
Esto es asi desde que tengo el blog. Aprovecho el fin de semana para preparar un buen postre que luego publico. Y me aseguro de tener comensales suficientes porque como ya os he contado otras veces, mis hijos no son mis mejores fans, que cruz...
No así el resto de la familia que de manera altruista se presta a probar todo lo que yo llevo a la comida familiar. Y siendo honesta, casi siempre gusta.
Normalmente cuando mis sobrinos eran mas pequeños, siempre había algo de chocolate porque ellos lo demandaban . Ahora también jajaja, pero se han acostumbrado a que lleve postres mas variados y con otros ingredientes que no sean el preciado chocolate.
Este postre es una muestra de ello. No lleva chocolate y sin embargo triunfó. Un pastel suave y con el dulzor justo (para mio que soy golosa, poco dulce) y con un añadido extra de los piñones que lo convierten en toda una delicia.
Me pasó la receta mi comercial de thermomix, que a su vez se la había pasado otra compañera. Pero yo he hecho algunos cambios sustanciales tanto en las cantidades como en sustituir el queso por yogur edulcorado desnatado con lo que le he aligerado unas cuantas calorías, que una está a dieta pero el dulce no lo perdona.
El caso es que no tenía muy claro si los cambios afectarían al postre y como no he probado el original no puedo comparar, lo que si os puedo asegurar es que esta versión mia es una delicia y seguro que algo mas ligera que la otra receta (aunque no de dieta jajaja)
INGREDIENTES:
250 ml de leche semidesnatada
500 gr de nata (crema de leche) para montar
3 yogur desnatadado edulcorado (unos 330 gr aproximadamente)
100 gr de azúcar
3 sobres de cuajada
50 gr de piñones
7 u 8 sobaos o bizcochitos (depende del molde que uséis)
Caramelo liquido para el molde
PREPARACIÓN:
Ponemos todos los ingredientes del pastel en el vaso de la thermomix (leche, nata (crema de leche), yogur, azúcar y los sobres de cuajada). Y programamos 10 minutos a 90º y velocidad 4.
Mientras se cocina, ponemos caramelo liquido en un molde alargado que cubra el fondo y parte de las paredes. Ponemos los piñones en el fondo.
Al acabar la cocción vertemos un poco de la mezcla sobre los piñones. Lo hacemos a traves de un cazo o una cuchara. Y a continuación ponemos los sobaos apretando ligeramente para intentar que los sobaos aplasten los piñones y no se muevan mucho.
Después vertemos el resto de la mezcla. Veréis como los sobaos van subiendo hacia arriba. No importa, así cuando le demos la vuelta al pastel se nos quedarán los sobaos como base. Queda muy chulo, ya veréis.
Dejamos enfriar a temperatura ambiente y luego guardamos en la nevera hasta el dia siguiente. O al menos unas cinco o seis horas.
Ponemos todos los ingredientes del pastel en el vaso y lo cocinamos.
Echamos caramelo liquido en el molde y ponemos los piñones en el fondo.
Vertemos un poquito de la mezcla sobre los piñones.
Y a continuación los sobaos apretando un poquito.
Echamos el resto de la mezcla y ya veis como los sobaos se suben. Luego al desmoldar quedan de base. Dejamos enfriar y a la nevera.
Un pastel super rico, suave y muy resultón.
Y al desmoldar quedan los sobaos abajo y el pastel encima.