Lo confieso, últimamente estoy más dulcera que nunca, y es que vivir cerca de tantas pastelerías ha hecho que me (mal) acostumbre a estar probando pasteles y delicias dulces varias veces por semana.. uff, la tentación es muy fuerte.
Aprovechando la inspiración hoy les traigo una deliciosa receta de pie de limón con cobertura de salsa de arándanos. La receta original es de mi tía Cristina que me dio a probar su increíble versión cuando estuvimos hace unos meses en Chile. Yo le hice algunas modificaciones y agregados como la salsa de arándanos, que le aporta un contraste perfecto al ácido del pie de limón.
Si no tienen arándanos pueden cambiarlos por algún otro fruto rojo como moras, frambuesas o frutillas (fresas). Y si no tienen ninguno de los anteriores también es posible no agregarle salsa y hacer solo la parte de la masa y el relleno, ¡queda igualmente delicioso (¡aunque recomiendo agregar la salsa que está para chuparse los dedos!)
Espero que les guste esta receta tanto como a mi y a mi nuevo estómago dulcero
Tiempo estimado de preparación: 35 minutos (+ 3 a 12 horas de reposo en refri/nevera)
Ingredientes (8 a 10 porciones)
Para la masa
2 huevos
100 grs de mantequilla
½ taza de azúcar
2 tazas de harina
1 cucharadita de polvos de hornear
2 cucharadas de leche
Para el relleno:
350 grs (aprox 1 tarro) de leche condensada
300 grs de yogurt natural o griego (aprox 2 envases de formato individual)
1 taza (200 ml) de jugo de limón (aprox 5 a 6 limones)
Ralladura de ½ limón
200 grs de arándanos
Para la salsa de arándanos:
4 cucharadas de azúcar
2 cucharadas de agua
Ralladura de ½ limón
1 tapita de licor (ron, whiskey o similar)
Paso a paso
Precalentar el horno a 180°C por 15 minutos
Comenzamos con la masa: En un recipiente o bowl mediano batimos los 2 huevos hasta que estén espumosos y agregamos ½ taza de azúcar y 125 gr de mantequilla derretida, mezclamos todo muy bien.
Luego agregamos 2 tazas de harina cernida (pasada por colador), 2 cucharadas de leche y polvos de hornear, revolvemos hasta obtener una masa suave.
Enmantequillar una fuente redonda para horno (de aprox 30 cm de diámetro) y distribuimos la masa en el fondo de manera homogénea cuidando de tapar perfectamente los bordes. Pinchar con un tenedor para que la masa respire en el horno (y no se infle demasiado).
Llevamos la masa al horno durante 5 minutos para precocer y luego reservamos.
Para el relleno: En otro recipiente o bowl poner la leche condensada, el yogurt natural, 1 taza de jugo de limón, la ralladura de limón y revolver muy bien los tres ingredientes hasta obtener una consistencia cremosa.
Verter la mezcla anterior sobre la base horneada y esparcir uniformemente.
Llevar la preparación durante 12 minutos al horno (esto para ayudar a que el relleno cuaje y la masa se termine de cocinar). Retirar del horno y esperar a que se enfríe unos 30 a 40 minutos antes de meter al refrigerador (nevera).
Para la salsa: lavar los arándanos y colocarlos en una olla pequeña a fuego bajo. Añadir una tapita de licor, la ralladura de ½ limón y el azúcar y comenzar a revolver. Con la ayuda de un tenedor aprieta levemente algunos arándanos para que suelten jugo. Verás que en pocos minutos el azúcar se disolverá, mezcla bien y deja hervir durante 5 minutos. Apaga el fuego y deja enfriar.
Llevar el pie de limón y la salsa de arándanos (por separado) al refrigerador durante al menos 3 horas (idealmente durante toda la noche). Idealmente luego de un par de horas en el refrigerados verter la salsa de arándanos sobre el pie y dejar tapado durante la noche. Si no te acuerdas de este último paso también lo puedes hacer antes de servir.
¡Y listo para disfrutar acompañado de un rico té o café!
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