Ahora bien, algunas veces no lo consumimos correctamente porque cometemos algunos errores con el pescado. Por falta de conocimiento, descuido o poca previsión, debemos ser conscientes en todo momento de la manera en que se descongela, se cocina o se compra.
Error Nº1: No adquirir pescado de calidad
Es vital siempre comprar pescado de calidad. Lo podemos obtener en pescaderías de confianza y es importante, además, que sea fresco. El pescado no debe oler demasiado, normalmente no huele a nada, si huele mucho, es que no es de calidad.
Error Nº2: No comprar con etiquetas y no saber de dónde procede
A la hora de comprar pescado de calidad, éste va a venir siempre con su etiquetado. Con ello, nos ofrece garantías y la información precisa de dónde viene, lugar, caducidad, fecha de captura… si vemos que no lleva etiqueta o nos falta información, entonces podemos reclamar.
Error Nº3: No saber descongelarlo
El pescado fresco puede guardarse en la nevera y también congelarse para que dure más días. Las propiedades serán las mismas. Pero puede ser que no lo comamos bien porque no sabemos descongelarlo correctamente. Lo mejor es dejar el pescado en el frigorífico durante unas cuatro o cinco horas.
Error Nº4: No lo cocinamos adecuadamente
Cada pescado tiene su proceso de preparado distinto. Algunos pescado no van tan bien para hacer fritura, otros no quedan bien a la plancha, porque en seguida se deshacen y otros mejor no ponerlos en el horno.
Error Nº5: Dejar pegado el pescado al cocinar
Es normal que esto suceda, pues cuando situamos el pescado, recién sacado de la nevera, en la sartén o se desmenuza o bien queda pegado. Para evitar esto es mejor bajar a medio fuego durante unos cinco minutos después de haber calentado el recipiente y, tras esto, situar y calentar el pescado.