El roscón es muy pero que muy fácil de preparar. El ingrediente principal no lo compramos en ninguna tienda, lo tenemos nosotros mismos (y si no lo tenemos, hacemos por tenerlo), paciencia. La paciencia es fundamental para que el roscón nos salga muy muy rico. No es un bizcocho que metamos al horno, saquemos, enfriemos, rellenemos y a comer... no.
Bueno, pues ahí vamos con los ingredientes.
Necesitaremos:
100ml de leche
15ml de agua de azahar
35ml de zumo de naranja
75gr de mantequilla derretida
2 huevos
Ralladura de media naranja
425gr de harina de fuerza
1 sobre de levadura liofilizada
100gr de azucar
1 chorro de miel
1 cucharadita de nuez moscada
Recordamos que todos los ingredientes tienen que estar a temperatura ambiente. Fundamental.
Elaboración.
Es muy muy sencillo. En un bol echamos todos los ingredientes líquidos (leche, agua de azahar, zumo de naranja, mantequilla, huevos y miel). Removemos bien para integrar todos los ingredientes y añadimos la ralladura de naranja. Volvemos a remover.
Echamos a continuación la harina, el sobre de levadura y la nuez moscada. (en este punto yo hago un hueco en la harina y le pongo una pizca de sal).
Removemos todo bien, que quede bien integrado. Yo lo hago en amasadora pero se puede hacer perfectamente a mano, con una cuchara de palo.
Una vez tengamos la masa integrada, la dejamos reposar 3 horas. (aquí empieza la paciencia).
Pasado este tiempo amasamos con las manos, muy bien amasado, durante 5 minutos, cuando tengamos una bola de masa la vamos voleando.
Forramos la bandeja del horno con papel vegetal y le hacemos un agujero en medio a la masa. Sobre la bandeja le vamos dando forma, haciendo el agujero cada vez mas grande, teniendo en cuenta que el roscón crecerá. Para meter la figura, la envolvemos en film transparente y la metemos debajo del roscón en este punto, antes del siguiente levado. Pintamos el roscón con huevo batido y lo decoramos como mas nos guste. A mi como no me gusta la fruta escarchada (que es lo tradicional) lo decoro con almendras y azucar mojado en zumo de naranja.
Ahora viene el levado que para mi es el importante... lo dejamos levar 4 horas dentro del horno apagado. Pasado este tiempo veremos que nuestro roscón ha crecido.
Sacamos el roscón, encendemos el horno a 180º calor arriba y abajo y metemos el roscón durante 20 o 25 min. yo lo dejo hasta que esté dorado por arriba.
Ya tenemos hecho nuestro roscón.
Ya nos podemos comer el roscón así, está buenísimo. Pero también podemos rellenarlo con nata (crema de leche) o trufa o lo que queramos.
Espero que os guste y que lo hagáis, de verdad merece la pena... huele la cocina a panadería en el día de reyes, pura delicia.
Fuente: este post proviene de La Dulce Paloma, donde puedes consultar el contenido original.
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