Esta receta es una verdadera delicia y muy fácil de preparar, además es una muy buena opción para preparar en estos días de Cuaresma, pues no lleva carne y está repleta de sabor, es de esas recetas que en lo personal me evocan maravillosos momentos de mi niñez, y ya saben que me encanta recordar a las personas que tanto quiero y los momentos felices, por medio de la comida, pues para mi es como un portal hacia el pasado que me transporta a ese preciso instante, con las personas con las que quisiera estar, pero te has puesto a pensar que con la cocina también vas creando los sabores y recuerdos que añorarán tus hijos o las personas a quienes les compartes tu comida? por eso me encanta cocinar, creo que por medio de la cocina te puedes expresar de una y mil maneras y sobre todo, puedes compartir probaditas de cariño...
Ingredientes:
3 Papas cocidas y peladas
2 Cucharadas de mantequilla
Leche la necesaria para formar un puré cremoso
Sal y pimienta al gusto
Tortillas de maíz
Aceite el necesario para freír
Lechuga lavada, desinfectada y partida en julianas
Tomate picado
Sala picante verde o roja
Jugo de Limón al gusto (opcional)
Procedimiento:
Primero debemos realizar el puré de papa, fundiendo la mantequilla en una cacerola y agregando las papas, las machacamos y agregamos sal y pimienta y leche la necesaria hasta formar un puré cremoso.
Untamos un poco de puré de papa en una tortilla y doblamos como quesadilla, y las vamos poniendo a dorar en aceite caliente, es importante que queden crujientes, así sabrán más rico, se trata que de cada lado se doren y que quede como tostada, cuando están listas, las vamos colocando sobre papel absorbente.
Para servir, colocamos un poco de lechuga y tomate dentro del taco dorado y servimos acompañado de salsa picante al gusto y unas gotas de limón, la verdad es que a mi me gustan mucho así, con mucho limón, tienen un sabor delicioso y fresco a la vez por tener la ensalada integrada, son riquísimas....