Hoy os propongo un postre muy sencillo y rápido de preparar, una tarta de queso y cuajada sin horno.
Una tarta de queso muy cremosa, se prepara con pocos ingredientes y el resultado es genial. Para hacer esta tarta la he preparado en un molde en forma de rosco, pero la puedes preparar en cualquier molde, incluso se puede preparar en moldes individuales, en vasitos o en flaneras.
En esta ocasión he preparado la tarta como si fuera un flan, he puesto caramelo líquido, pero la puedes preparar sin caramelo, solo tienes que poner más azúcar en la tarta.
A mi me gustan las tartas de queso cremosas, incluso me gusta que queden un poco tiernas, esto también lo puedes hacer con esta tarta, aunque no se haga en el horno se puede preparar igual que las que van al horno, solo tienes que añadir un poco más de leche y así te quedará más jugosita.
También puedes darle un puntito más de sabor añadiendo otros tipos de queso, yo he utilizado el queso de untar tipo Philadelphia, este es suave, pero puedes añadir un trozo de queso más fuerte y así darle más sabor.
En esta receta he utilizado todos los ingredientes lácteos sin lactosa, ahora podemos preparar todo tipo de postres sin lactosa, es una ayuda para los que tenemos en casa alguno que no puede tomar lactosa. Puedes hacerlo con la leche que te guste.
El caramelo he utilizado uno ya comprado, yo pongo poco caramelo, pero puedes hacerlo tu en casa.
Aquí os dejo la receta que os va a encantar!!!
Ingredientes:
300 gr. de queso de untar
600 ml. de nata (crema de leche) pata montar
200 ml. de leche
125 gr. de azúcar
1 sobre de cuajada
Caramelo líquido
Preparación:
Para preparar la tarta de queso y cuajada sin horno, lo primero pon un cazo con la nata (crema de leche), el azúcar y el queso a fuego medio. Ves removiendo hasta que se deshaga el queso.
Disuelve el sobre de cuajada en un vaso donde tienes los 200 ml. de leche, remueve bien hasta que no queden grumos.
Cuando la nata (crema de leche) y el queso esté apunto de empezar a hervir añade el vaso de leche con la cuajada disuelta, remueve con unas varillas sin para hasta que se forme una crema un poco más espesa. Cuando esté apaga el fuego y reserva.
Prepara un molde, pon en el fondo un poco de caramelo líquido y vierte la crema de queso. Deja la tarta de queso y cuajada sin horno en la nevera un mínimo de 4-5 horas o de un día para otro.
Desmolda la tarta en una fuente para servir, acompaña la tarta con más caramelo líquido para quien quiera ponerse un poco más.
A disfrutar!!!
Montse