He usado el molde desmontable de lekue, que tiene unos 22 o 23 cm de diámetro.
Ingredientes para el bizcocho:
2 huevos
50 gr de azúcar
1 pizca de sal
50 gr de harina
1/2 cucharadita de levadura
1 cucharadita de vainilla
Ingredientes para la crema de whisky;
300 ml de leche
150 gr de azúcar
500 gr de nata (crema de leche) para montar
2 sobres de cuajada
1 cucharadita de vainilla liquida
80 o 100 ml de whisky
Ingredientes para la crema de yemas;
2 hojas de gelatina
3 huevos
110 gr de azúcar
10 gr de maizena
50 gr de agua
1 pizca de colorante amarillo
1 cucharadita de crema de vainilla
Lo primero que haremos será preparar la base de bizcocho, para ello colocamos la mariposa en el vaso de la thermomix e introducimos los huevos, el azúcar y la sal, programamos 4 min, 37º vel 3 y medio.
Añadimos la harina, la levadura y la vainilla y mezclamos 10 seg al 2, quitamos la mariposa y terminamos de mezclar con una cuchara y mucho mimo.
Vertimos la mezcla en un molde engrasado que pueda ir al microondas, tapamos con papel film y llevamos al micro, máxima potencia 2 min y medio.
Con el bizcocho listo preparamos la crema de whisky.
Introducimos el resto de ingredientes menos el whisky en el vaso de la thermomix y programamos 7 min, 90º, vel 4.
Añadimos el whisky y programamos 1 min, 90 gr, vel 4.
Vertimos la mezcla sobre la base del bizcocho y la dejamos enfriar por lo menos 1 hora.
Aquí podemos preparar la crema de yemas y meterla en una manga mientras cuaja la crema anterior, o tomarnos un descanso de una hora y así según la terminemos la ponemos sobre la crema de whisky. Yo me he decantado por esta segunda opción.
Para la crema de yemas, ponemos la gelatina a remojar en agua fría.
En el vaso de la thermomix ponemos el resto de ingredientes y programamos 7 min, 90º, vel 4. Añadimos la gelatina bien escurrida y mezclamos 10 seg al 4.
Vertimos sobre la crema de whisky ya cuajada.
Antes de servirla espolvoreamos con azúcar y requemamos con un soplete.
La tarta queda buenísima y el bizcocho en el microondas ha sido todo un descubrimiento, queda alto, jugoso, esponjoso y ya veis lo que se tarda en prepararlo, nada y menos. Os animo a probar, ya no volveréis hacer un bizcocho base para tarta en el horno.