La verdad es que tenía clarísimo que quería preparar la clásica tarta con base de masa sable, una rica crema y bien variadita de frutas, pero no ha podido ser y es que ahora mismo estoy sin horno. Mi horno que no ha cumplido 6 años y es el que venía de obra, nunca ha funcionado bien, estaba lleno de trucos para poder hacer cualquier cosa y había cosas que eran impensables como por ejemplo asar un pollo, lo quemaba por fuera y quedaba crudo por dentro por bajo que lo pusieras… en fin, que fue a peor hasta que nos hemos decidido ha cambiarlo. El caso es que se ha retrasado el nuevo y no ha llegado a tiempo para poder hacer el desafío. Yo en una ocasión como esta, la verdad que no quería faltar, así que se me ocurrió hacer la tarta con una base de bizcocho para microondas y ha salido deliciosa.
Lo de la variedad de frutas ya es otro cantar, pensé que tenia fruta de sobra en casa y resulta que no…. habíamos terminado las fresas y los albaricoques me pareció una pereza pelarlos y picarlos así que me decanté por kiwis, plátanos y melón.
Ingredientes para el bizcocho:
2 huevos
50 gr de azúcar
1 pizca de sal
50 gr de harina
1/2 cucharadita de levadura
1 cucharadita de vainilla
Ingredientes para la crema pastelera;
2 huevos
30 gr de Maizena
65 gr de harina
1 pizca de sal
15 gr de mantequilla
350 ml de leche
esencia de vainilla
Fruta fresca variada para cubrir la tarta
Lo primero que haremos será preparar la base de bizcocho, para ello colocamos la mariposa en el vaso de la thermomix e introducimos los huevos, el azúcar y la sal, programamos 4 min, 37º vel 3 y medio.
Añadimos la harina, la levadura y la vainilla y mezclamos 10 seg al 2, quitamos la mariposa y terminamos de mezclar con una cuchara y mucho mimo.
Vertimos la mezcla en un molde engrasado que pueda ir al microondas, tapamos con papel film y llevamos al micro, máxima potencia 2 min y medio.
El molde que yo tengo para poder hacer el bizcocho en el micro es de 22 cm y el molde en el que quería hacer la tarta era de 18 cm así que recorté el bizcocho y lo puse en el molde que quería utilizar.
Ahora vamos con la crema pastelera que no tiene mas ciencia que introducir todos los ingredientes en el vaso de la thermomix y programar 6 min, 90º, vel 4. Vertimos la mezcla en el molde que vamos a usar, encima del bizcocho y dejamos reposar hasta el día siguiente.
Cuando la tarta ya esté bien fría y la crema pastelera esté suficientemente consistente que se sostenga por si misma, la desmoldamos y la cubrimos con la fruta fresca.
Como veis es una tarta sencillísima que podéis hacer en menos de 30 min y de verdad que queda muy rica, el bizcocho es muy suave, la crema riquísima y luego tiene el frescor de la fruta. Una delicia.
Y ahora podéis pasar a ver la maravilla de tartas que han preparado mis compañer@s del desafío AQUI.