Qué pocos ingredientes tiene esta tarta y qué sabor tiene tan rico y natural, a veces parece que estás tomando una compota caramelizada de manzana. Al no llevar huevo o ningún tipo de grasa puede ser altamente recomendable para alérgicos o simplemente si no quieres una receta muy rebuscada.
Como siempre recomiendo para este tipo de tartas, la variedad de manzanas para utilizar sería las Reinetas, siempre aportan ese dulzor y sabor característico de esta variedad.
Tarta ligera de manzana
Ingredientes
6 manzanas de tipo Reineta
180 gr. de harina
200 gr. de azúcar blanca
1 sobre de levadura
Mermelada de albaricoque
Elaboración
Lo primero de todo será pelar y descorazonar las manzanas, luego las picamos que no triturar, me explico, no tenemos que hacer un puré con las manzanas sino un picadillo muy minucioso, lo podéis hacer bien con la picadora o a mano.
Hecho este paso, que es el más laborioso, mezclamos las manzanas con la harina, la levadura y la mitad del azúcar.
En un recipiente redondo y engrasado con mantequilla vertemos el preparado y con una cuchara aplanamos la superficie para alisarla. Ahora espolvoreamos el resto del azúcar por encima.
El horno estará precalentado al máximo con calor arriba y abajo, cuando metamos la tarta estará los primeros 30 minutos sólo con calor abajo y después de este tiempo pondremos el calor arriba (apagando el fuego de la parte inferior) así estará otros 10 minutos, de este modo caramelizamos el azúcar de la superficie.
Una vez retirada la tarta del horno la cubriremos con mermelada de albaricoque, mejor hacer este paso con el postre aún caliente, así queda bien asentada y muy apetitosa.
Tarta sencilla y ligera de manzana además de exquisita.