El otro día, venían unos amigos a comer a casa y se me ocurrió hacer está tarta, fui maquinandola mientras iba comprando ingredientes en el super. Decir que no la aconsejo a aquellos que no les guste el chocolate puro, ya que acaba hartando, y lo dice una que es adicta al chocolate. No puedo poneros una fotografía mejor porque no tengo molde desmoldable y tuve que hacerla en una fuente de pirex, así que cuando tenga el molde, repito tarta y foto.
INGREDIENTES
La cantidad de ingredientes dependerá de lo grande del molde.
300gr de lenguas de gato
2 Tabletas de chocolate puro Valor (nos sobrará un poco)
500ml de nata (crema de leche) para montar (yo tampoco la usé toda)
1 café descafeinado
ELABORACIÓN
La elaboración es sencilla.
Hay que ir haciéndolo todo a la vez, así que necesitaremos libertad de movimiento y espacio.
Primero de todo, hacemos el café descafeinado y reservamos.
Colocamos una primera capa de lenguas de gato y las pincelamos con el café.
A continuación, preparamos el chocolate que irá entre las capas de lenguas de gato, para ello, metemos en un recipiente apto para microondas una tableta de chocolate a trozos y le añadimos un poco de nata (crema de leche), al micro unos 30 seg, damos vueltas y vamos deshaciendo, esto tendremos que hacerlo varias veces hasta que consigamos derretir toda la tableta, no lo intentéis hacer todo de una, porque se os quemará el chocolate. Le vamos añadiendo nata (crema de leche), hasta que veáis que vais a tener suficiente para terminar la tarta.
Cubrimos la primera capa de lenguas con esta mezcla, sobre ella ponemos una capa de lenguas de gato y pincelamos generosamente las lenguas de gato en café, no os aconsejo que las metáis en el bol con café porque se os desharán, (son lenguas de gato crujientes, no de las de tipo bizcocho de soletilla). Bueno pues así capa por capa.
Para finalizar, deshacemos parte de la otra tableta de chocolate con la que haremos la cobertura, cuando la tengamos bien fundida, la pondremos sobre la ultima capa de la tarta y listo. Sólo nos quedará adornarla, en este caso con virutas de chocolate.