Mi afición por los platos con hojaldre es muy conocida.
Me parece que es un ingrediente básico de la cocina. Al menos para mí que siempre procuro tener hojaldre en la nevera. En cualquier momento puedes organizar un plato, sea dulce o salado, con resultados muy buenos.
Este entrante es una prueba, un poco de sobrasada y de cebolla caramelizada que tenía en la nevera y salieron estas tartaletas que estaban más que buenas.
Lo mejor del hojaldre es que es rápido de cocinar, le va bien lo dulce y lo salado y es económico. Todo son ventajas.
INGREDIENTES: (para 4 tartaletas)
1 lámina de hojaldre
cebolla caramelizada
sobrasada
PREPARACIÓN:
Extendemos la lámina de hojaldre y recortamos círculos del tamaño de los moldes de tartaleta. Si no tenéis moldes, recortáis un circulo y un aro. De esta manera ponemos el aro de hojaldre sobre el círculo y al hornearse subirá creando una pared.
Pinchamos el hojaldre.
Ponemos un fondo de sobrasada en cada tartaleta.
Y cubrimos con la cebolla caramelizada. Horneamos a 180º unos 20 minutos.
Y calentitas están buenísimas. El hojaldre crujiente y el relleno con ese contraste de sabores.