La verdad que es un titular in poco tonto para una receta de tiramisú. No es que traiga una receta especialmente fácil de tiramisú, realmente este postre en sí es muy sencillo de realizar, de igual la preparación que uses.
He pensado que es la receta ideal para traeros en unas semanas tan duras como son las del mes de septiembre. La vuelta al cole de la que os hablaba la semana pasada. El final de las vacaciones, particularmente duro, septiembre es, en general, desde mi punto de vista, más difícil aún que la llamada cuesta de enero.
Así que una buena forma de alegrar nuestros días es, permitiéndonos algún antojo, que sobretodo, nos llene el alma y no nos suponga en esfuerzo económico, bastante tenemos ya con la cuesta de septiembre.
El tiramisú tiene, entre los más golosos, detractores y muchos fans. De hecho en mi casa, hay de todo. Lo que sí que es un acierto seguro, es el relleno. Si no te va mucho el tema del café tienes que probar a hacer un postre de cuchara, como una especie de crema o algo así, solamente con el relleno.
INGREDIENTES:
500 gr de mascarpone
100 gr de azúcar
2 claras
4 yemas
24 bizcochos
100ml de café
Cacao en polvo
Café en polvo
Una pizca de sal
ELAVORACION:
Lo primero que haremos será emborrachar los bizcochos con el café. Esto un poco al gusto. Personalmente a mí no me gustan muy empapadas este tipo de preparaciones, así que me los he ido pincelando un poco con el líquido.
Colocamos una primera capa de bizcocho en una fuente rectangular y empapamos al gusto con el café.
Por otro lado batimos las yemas junto con el azúcar y la sal hasta que espumen un poco. Incorporamos el queso mascarpone y mezclamos con ayuda de la batidora, a velocidad media.
Montamos las claras a punto de nieve. Para esto tuve ayuda, con la batidora de una sola velocidad no motón, así que lo hicimos a la antigua usanza, a mano. Y digo lo hicimos porque me ayudó las motón mi suegra.
Mezclamos con el resto con movimientos envolventes. Cuando usamos claras a punto de nieve este gesto es importante ya que si las batimos el conjunto pierde la esponjosidad que le aportan las claras.
Ponemos una capa de crema sobre los bizcochos y después espolvoreamos con el cacao y el café. Ponemos otra capa y repetimos la operación.
Mete el tiramisú por lo menos 3 horas de nevera pero si lo haces de un día para otro mejor.
FOTOS Y ESTILISMO TCV